Golpe de efecto de Grifols en el mercado europeo de los derivados del plasma. La compañía se hará con el control de la alemana Biotest con una inversión de 1.100 millones de euros que reforzará la posición de la española en Europa.
Grifols ha alcanzado un compromiso de compraventa de acciones con la sociedad Tiancheng Pharmaceutical Holding, radicada en Hong Kong, que es la que ostenta cerca del 90% del capital de Biotest. Al tratarse de una firma cotizada en la bolsa alemana, la operación se llevará a cabo a través del lanzamiento de una opa, para la que ya se han iniciado los trámites ante el supervisor germano.
Emisión de deuda de 2.000 millones
La contraprestación incluida en la oferta alcanza los 773 millones de euros, a los que hay que añadir la asunción de un préstamo de cerca de 315 millones de euros concedido en su día a Biotest por su matriz.
En un comunicado remitido a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) con los detalles de la operación, Grifols expone que acudirá al mercado con una emisión de deuda de 2.000 millones de euros para financiar la adquisición, para la que ya dispone de un préstamo puente. La compañía espera cerrar la compra en el primer semestre del próximo año.
Sin dividendo para reducir deuda
Grifols espera absorber este endeudamiento adicional mediante los flujos de caja derivados de la operación. No en vano, uno de los principales objetivos de la farmacéutica es reducir su apalancamiento financiero, hasta el punto de que la empresa ha manifestado su intención de no llevar a cabo más operaciones corporativas ni repartir dividendos hasta que la ratio deuda/Ebitda se reduzca por debajo de cuatro veces.
Al cierre del primer semestre, el apalancamiento financiero de Grifols se situó en una ratio deuda/Ebitda de 4,9 veces, dos décimas por debajo de la consignada a finales de marzo. La entrada del fondo soberano de Singapur GIC en la filial de EEUU reducirá la proporción en 0,6 veces, toda vez que Grifols prevé destinar los ingresos a enjugar deuda.
26 centros de producción
En cuanto al pago de dividendos, la crisis derivada del Covid-19 ya había provocado una suspensión temporal de la remuneración al accionista con motivo del retraso en la celebración de la junta general hasta el último trimestre de 2020.
De consumarse, la compra de Biotest dará acceso a Grifols a 26 centros de producción de plasma en Europa (repartidos por Alemania, República Checa y Hungría) e incorporará a su cartera 12 productos diferentes en las áreas terapéuticas de hematología, inmunología clínica y medicina intensiva, con una presencia comercial global en más de 90 países y 1.928 empleados.
Anuncio de la oferta
Esta adquisición equilibrará la presencia en el exterior de la empresa, hasta ahora muy focalizada en mercados asiáticos y EEUU, donde ha protagonizado las últimas operaciones.
Este viernes, Grifols inicia el proceso de compra de Biotech con el correspondiente anuncio al supervisor alemán del lanzamiento de la opa sobre Biotest, una operación que quedará condicionada a las pertinentes autorizaciones administrativas.