Fumata blanca, con reservas. LaLiga ha logrado sacar adelante el acuerdo con CVC para dar entrada al fondo en el negocio del fútbol profesional a cambio de una inyección de 2.700 millones, aunque con una modificación de relevancia respecto al planteamiento inicial: ni FC Barcelona ni Real Madrid formarán parte de este pacto, al menos en un primer momento.
Una propuesta introducida a última hora por el fondo ha cambiado el escenario planteado hasta la fecha, que apuntaba a una más que probable batalla judicial. En virtud de esta proposición, aquellos clubes que no estén conformes con el pacto pueden quedar al margen y no ceder sus correspondientes derechos.
Sin modificación económica
En función del resultado de la votación de la asamblea, 38 de los 42 clubes han aceptado el pacto, de modo que cuatro quedarán al margen, entre ellos el FC Barcelona y el Real Madrid; eso sí, con la posibilidad de cambiar de opinión en el plazo de tres años.
Merced a este planteamiento, CVC mantendrá la totalidad del montante económico durante esos tres años porque las cantidades que corresponden a esos cuatro clubes, en torno a 600 millones, quedarán reservados para cubrir la eventual situación de una vuelta atrás.