Un 42,7% de los establecimientos catalanes afirman haber sido afectados por la crisis derivada de la pandemia del coronavirus durante el segundo trimestre del año. Esta cifra supone un 12,6% menos que la registrada entre los tres primeros meses de 2021, según ha informado la Generalitat.
Estos resultados han sido obtenidos en la Encuesta de clima empresarial realizada por el Instituto de Estadística de Cataluña (Idescat), que especifica que el sector que ha sufrido un mayor impacto ha sido el de la hostelería, con un 90%. En cambio, los menos afectados por la crisis han sido la industria, con un 37%, y la construcción, con un 25,1%.
Difícil recuperación
El 44% de los encuestados ha manifestado que no prevé recuperar la facturación previa a la crisis sanitaria durante el próximo año, lo que supone una mejoría de 5,9 puntos. Mientras, el 14,7% “ven difícil recuperar el nivel habitual de facturación o creen que no lo lograrán y tendrán que cerrar”.
La encuesta también muestra el deterioro de la disposición de aprovisionamiento de los negocios y los problemas de liquidez respecto al trimestre anterior, con un aumento de 7,2 y 1,4 puntos respectivamente. A excepción de estos dos, ha habido “una mejora en la mayoría de indicadores relacionados”, como la disminución de la facturación, que golpea a un 77,3% de los encuestados; seguido por un aumento de la complejidad de procesos por los protocolos higiénicos (67,6%) y el impacto sobre la ocupación (45,5%).
Sin dificultades en la contratación
Por otra parte, el 53,8% de los establecimientos asegura que “no ha tenido ninguna dificultad en contratar personal en los últimos tres años”, algo que seguramente se deba a la alta demanda de empleo en Cataluña, sobre todo a raíz del Covid-19.
Entre las cualidades más valoradas por los establecimientos se encuentran las competencias transversales, la experiencia profesional y las competencias sociales y cognitivas, consideradas como “muy o bastante importante” por más del 80% de encuestados. Mientras, la formación académica se sitúa en el 72,8% y, entre los recién graduados, los negocios creen que “tendrían que mejorar” la práctica, entre otros factores.