Endesa cerró la primera mitad de 2021 con un beneficio neto de 832 millones de euros, lo que supone un descenso del 26% respecto al mismo periodo de 2020. Los resultados están condicionados por el efecto de las provisiones de 2020, sin los cuales el descenso del resultado positivo se reduciría al 3%.
No obstante, las cuentas de la compañía se vieron importadas por los notables repuntes de precios en los mercados de materias primas y de derechos de emisión de CO2, así como su correspondiente traslación al mercado mayorista de la electricidad.
Ratifica previsiones
Así, Endesa ha sido una de las grandes perjudicadas por los elevados precios que se dieron durante el mes de junio, toda vez que debe acudir habitualmente al mercado debido a que su capacidad de generación no es suficiente para abastecer a la totalidad de sus clientes.
Pese a estas circunstancias relacionadas con el entorno del mercado, Endesa ha confirmado al mercado que mantiene sus previsiones de resultados para 2021, que incluyen un beneficio neto cercano a 1.700 millones de euros y un resultado bruto de explotación (Ebitda) en el entorno de los 4.000 millones.ç
Normalización
En este sentido, el director financiero de la energética, Luca Passa, ha adelantado que Endesa espera una cierta normalización de la situación durante la segunda mitad del año, que se plasmará en una mejora de los márgenes una vez que la compañía haya terminado de gestionar la volatilidad de los precios.
Cabe señalar que los resultados no incluyen los efectos de los máximos históricos en el mercado mayorista de la electricidad, por encima de la cita de 100 euros por megawatio/hora, que se han registrado ya en el mes de julio.
Caída del Ebitda
El Ebitda de la empresa a cierre de junio se situó en los 1.879 millones, un 19% menos que en el primer semestre del año anterior, aunque en términos comparables el descenso fue del 4%. El comportamiento de los negocios liberalizados, generación y comercialización, más afectados por las condiciones de mercado, ha sido clave para explicar este descenso.
Por su parte, los ingresos de la energética de enero a junio ascendieron a 10.272 millones de euros, con un incremento del 15,6% frente a los 8.883 millones de euros del mismo periodo de 2020.
Más renovables
La deuda neta de Endesa alcanza los 8.184 millones de euros, lo que supone un alza de 1.300 millones derivada de la coyuntural evolución negativa del flujo libre de caja y del pago del dividendo a cuenta de los resultados de 2020, realizado en enero.
En lo que respecta a las renovables, la cartera total de la compañía asciende a 52.900 megavatios (MW), 11.000 MW más que a cierre de 2020, con 7.000 MW nuevos con punto de acceso y conexión a la red concedido (300 MW más que a final del pasado año).