Si la demanda del servicio del taxi es indicativa de que la movilidad se ha recuperado, los datos en Barcelona muestran que se ha llegado a índices cercanos a los momentos justo anteriores a la crisis sanitaria provocada por la pandemia del Covid. En la capital catalana el sector del taxi alcanza el 98% de los niveles previos a la crisis, mientras que en Madrid es del 62%.
Eso significa que el taxi ha crecido un 25% tras el final del estado de alarma, con una demanda por encima de la movilidad experimentada en 2020, y muy cerca ya de los niveles anteriores a la pandemia.
Los datos los ha ofrecido Free Now, y muestran que la actividad había caído alrededor de un 95% durante la primera ola de la pandemia, es decir, una parada casi total. La recuperación ha sido progresiva y se ha acelerado a medida que se reducían las restricciones por la pandemia.
Viajes a la periferia
En Madrid, que es la ciudad española en la que se hacen más viajes en taxi, la recuperación es menor, y está por debajo de la media, con ese 62% de utilización, sobre su potencial.
En Barcelona, sin embargo, esa recuperación ha sido mucho más rápida y se ha alcanzado el 98% en comparación con febrero de 2020, después de un crecimiento de la movilidad de casi el 28% en las últimas semanas.
Una de las características del nuevo uso del taxi, según Free Now, es que se reclama el servicio para viajes a la periferia. La explicación que se ofrece es que hay un elevado número de personas que trabajan desde casa o que prefieren reunirse con amigos y familiares fuera del centro de la ciudad.