Las cifras revisadas del Instituto Nacional de Estadística confirman la vuelta de la economía española a tasas de crecimiento negativo en el primer trimestre de 2021, tras dos periodos consecutivos al alza, aunque con descensos ligeramente inferiores a los consignados en la primera estimación. Así, el PIB registró una caída del 0,4% hasta marzo, en términos intertrimestrales, una décima menos que el primer dato de contabilidad nacional facilitado en abril por el organismo oficial.
Por aquel entonces, la mayoría de los indicadores estadísticos sobre la evolución económica reciente ofrecían resultados hasta febrero, mientras que los resultados publicados este jueves sí incorporan todos los indicadores estadísticos del primer trimestre del año, según explica el instituto estadístico.
Consumo e inversión, a la baja
Las cifras revisadas confirman que el consumo y la inversión empujaron al PIB a registrar tasas negativas durante el primer trimestre del año debido al efecto de la tercera ola del Covid-19, que llevó a la mayoría de las Comunidades Autónomas a establecer nuevas restricciones de movilidad y actividad económica.
Sin ir más lejos, el consumo de los hogares, de las instituciones sin fines de lucro al servicio de los hogares y de las Administraciones Públicas mostraron descensos del 0,6%, del 2,2% y del 0,1% hasta marzo, frente a las tasas positivas del 0,0%, del 0,6% y del 1,3% del trimestre anterior, respectivamente.
Descenso interanual del 4,2%
La inversión, por su parte, también regresó a valores negativos en el primer trimestre después de dos trimestres de avances. En concreto, entre enero y marzo la inversión se contrajo un 0,8%, frente al crecimiento del 1% del trimestre anterior y del aumento histórico del 21,5% que experimentó en el tercer trimestre de 2020.
En lo que se refiere a la tasa interanual, el PIB descendió en el primer trimestre a un ritmo del 4,2%, muy inferior al registrado en el cuarto trimestre y también una décima menos de lo esperado en el avance de datos.
Quinta bajada consecutiva
No obstante, esta contracción es la quinta consecutiva que el PIB acumula, aunque se trata de la menos abultada de este periodo negativo, marcado por la incidencia de la pandemia.
La demanda nacional restó 2,2 puntos al PIB interanual, cifra 4 puntos superior a la del cuarto trimestre de 2020, mientras que la demanda externa tuvo una aportación negativa de 2 puntos, siete décimas más que en el trimestre anterior.
Empleo
Las exportaciones e importaciones también suman cinco trimestres de caídas interanuales tras retroceder un 10,7% y un 5,2% en el primer trimestre, aunque ambas tasas se han moderado respecto al trimestre anterior, cuando las ventas al exterior disminuyeron un 16,3% y las compras, un 9,4%.
El empleo de la economía, en términos de horas trabajadas, bajó un 2% en el primer trimestre respecto al trimestre anterior, tres puntos menos que en el trimestre anterior. Los puestos de trabajo equivalentes a tiempo completo, definidos como el número de horas trabajadas entre la jornada media realizada en puestos de trabajo a tiempo completo, crecieron un 1,4% en el primer trimestre, dos décimas más que en el trimestre anterior.