El presidente del BBVA, Carlos Torres, ha pronosticado una notable recuperación de la economía global a partir de la segunda mitad del presente año aunque se ha mantenido cauto relativo a la evolución en España al admitir que el impacto de los fondos europeos en el país tendrá “un impacto muy limitado” en 2021.
En el discurso pronunciado durante la junta de accionistas del banco, celebrada este martes de forma exclusivamente telemática, por segundo año consecutivo, Torres ha señalado no obstante que la entidad espera que las cantidades provenientes del programa Next Generation EU den un fuerte impulso al PIB español a partir de 2022.
Recuperar el dividendo
El ejecutivo ha puesto en valor el papel de la entidad durante la pandemia y su rendimiento pese a las dificultades sobrevenidas por la crisis del coronavirus. Entre otros factores, Torres ha destacado que el retorno para el accionista en los dos últimos años ha sido del 8%, entre la evolución de la cotización y del dividendo, “el más elevado del sector en toda España”.
En lo referido a la remuneración al accionista, el presidente de la entidad ha ratificado la intención del banco de recuperar una política de repartir entre los socios entre un 35% y un 40% de los resultados, una vez que el Banco Central Europeo (BCE) levante las actuales restricciones, que limitan el 'pay-out' a un máximo del 15% hasta el próximo mes de septiembre.
La operación de EEUU
En la asamblea, Torres también ha recordado la gran operación de venta del negocio en EEUU, acordada el pasado año y cuyo cierre, que aún está pendiente, podría reportar al BBVA ingresos superiores a los 8.000 millones de euros. En este sentido, Torres ha valorado la flexibilidad que le otorga esta circunstancia para destinar este dinero a diversas actuaciones.
Entre ellas figura el plan de recompra de acciones por hasta un 10% del capital que ha sido uno de los puntos del día aprobados en la junta.
Protestas sindicales
Otro de ellos, relativo a las remuneraciones variables de los altos ejecutivos, ha sido el que más polémica ha despertado en la asamblea, especialmente entre los representantes de los trabajadores. En sus diversas intervenciones, trasladadas por escrito, han criticado con dureza esta decisión en el contexto de la negociación de un ajuste de plantilla que diversas fuentes del sector sitúan en el entorno de los 3.000 trabajadores.
Además, los diferentes sindicatos que han intervenido en la junta también han manifestado sus quejas por las presiones recibidas por parte de la entidad para elevar la rentabilidad, especialmente en lo referido a la actividad comercial.
Un ERE para la sostenibilidad
En su respuesta, Torres ha defendido que la remuneración variable de los directivos está en consonancia con los resultados del banco y ha recordado la renuncia que todos ellos hicieron a esta cantidad en 2020 con motivo de la pandemia.
El presidente del BBVA ha hecho referencia también al proceso de ajuste de plantilla, que ha definido como clave y necesario para “garantizar la sostenibilidad de la entidad y del empleo en el futuro”. Torres ha lanzado también un mensaje para que tanto el banco como los representantes de los trabajadores “trabajemos conjuntamente en pos de esa sostenibilidad. Queremos el mejor acuerdo posible para todos”.