Cuatro años y dos meses. Esto es lo que ha costado reactivar el concurso del NitBus. El nuevo autobús nocturno entre Barcelona y su área metropolitana estará operativo a partir del 1 de mayo de 2021. A partir de aquella fecha se resolverá la equis de la ecuación de quién es el operador, sea el actual adjudicatario, Tusgsal, o una rival.
Lo pone negro sobre blanco el AMB en el orden del día del consejo metropolitano de mañana martes, 26 de enero. El Área Metropolitana reconocerá una deuda extrajudicial con Tusgsal de 1,4 millones de euros por su explotación del servicio nocturno hasta que tome las riendas del contrato "la nueva empresa adjudicataria del proceso de nueva licitación".
"Antes del 1 de mayo"
Ese proceso, el de mantener la contrata pública con Tusgsal o hallar a un nuevo operador, ya tiene fecha. Será "antes del 1 de mayo de 2021", según el gobierno metropolitano de BComú-Entesa, PSC, ERC y Junts.
Mientras no se resuelva el nuevo contrato, que el cuatripartito ha decidido que se licite junto al servicio diurno, el AMB compensará a Tusgsal de forma mensual. Ha sido la cooperativa laboral quien ha mantenido los buses lanzadera durante los cuatro años en los que la adjudicación ha estado en barbecho.
Proceso revertido en 2016
El aletargamiento del NitBus se remonta a noviembre de 2016. Aquel mes, el gobierno del AMB anuló el proceso de licitación a Alsa tras recabar un dictamen favorable del Tribunal Catalán de Contratos del Sector Público (TCCSP).
Previo a ello, se había librado una auténtica batalla campal económico-política al quedar excluido Tusgsal por una cuestión técnica: no disponía de unas cocheras. La pérdida del NitBus suponía un duro golpe para una cooperativa laboral con mucho arraigo en la zona de Badalona y Sant Adrià. Por su parte, Alsa, que ganó el procedimiento, prometió acudir a la justicia para lograr indemnizaciones económicas, algo que jamás ha hecho.