EasyJet ha registrado pérdidas por primera vez en sus 25 años de vida. La compañía pasa de tener beneficios de cientos de millones al año a entrar en el terreno de los números rojos con cifras mayúsculas: la ‘low cost’ ha perdido 1.421 millones de euros (1.273 millones de libras) este año hasta el 30 de septiembre.
El balance contrasta con los beneficios de 480 millones de euros (430 millones de libras) que tuvo la aerolínea británica en los 12 meses anteriores. Desde el año pasado, la empresa ha perdido la mitad de su pasaje. La situación la ha obligado a buscar financiación por valor de 3.350 millones de euros (3.000 millones de euros), que ha reunido de accionistas, deuda e incluso recurriendo a la venta de algunos de sus aviones.
Volará al 20%
La línea aérea ha decidido operar solo a un 20% de su capacidad al menos hasta el próximo enero, tras haber perdido más de la mitad de sus ingresos en un año en el que la crisis del coronavirus ha causado un fuerte impacto en el sector aéreo. Los confinamientos, las restricciones sanitarias y la debacle turística han propiciado una fuerte caída en el número de pasajeros de avión.
En particular, Easyjet ha perdido la mitad de sus pasajeros respecto al año anterior. La crisis también ha comportado la quema de una gran cantidad de liquidez por parte de la compañía: 1.563 millones de euros (1.400 millones de libras) solo de abril a septiembre. La deuda neta del grupo se ha triplicado hasta alcanzar los 1.228 millones de euros (1.100 millones de libras).
Peor de lo previsto
Las pérdidas generadas son mayores a las que ya preveía la multinacional, que hace un mes las estimó en los 900 millones de euros. Los mercados han reaccionado negativamente a la noticia, y las acciones de Easyjet han perdido hoy un 1,9% de su valor en la bolsa londinense.
A pesar de ello, la empresa se muestra optimista, ya que asegura que las reservas de billetes han subido un 50% desde el anuncio del 90% de efectividad en la vacuna Pfizer. Easyjet calcula que la demanda implícita por viajar sigue siendo alta, y que los pasajeros volverán cuando la pandemia afloje. De hecho, la ‘low cost’ ha anunciado la incorporación de una nueva base de operaciones en Málaga que creará 900 puestos de trabajo a partir de primavera de 2021.