El Gremio de Restauración de Barcelona ha denunciado este lunes la “discriminación” que sufren los bares y restaurantes catalanes tanto por el cierre de los locales desde hace una semana como por el toque de queda desde las diez de la noche, que fuerza el fin del servicio de reparto y recogida. La patronal ha asegurado que la bajada de persianas de estos días no ha logrado rebajar la tasa de contagios, por lo que ha reclamado la reapertura entre las seis de la mañana y las nueve de la noche.

En un comunicado, el gremio critica que el Govern haya aplicado el cierre cuando el Ministerio de Sanidad no prevé esa medida. “Es ilógico que la Generalitat participe de los acuerdos tomados por el Consejo Interterritorial del Sistema de Salud y que, a continuación, se olvide de los criterios comunes para continuar perjudicando a la restauración”, señala. Ante este panorama, el director del gremio, Roger Pallarols, ha reclamado que se aplique una reapertura “inmediata” entre las seis de la mañana y las nueve de la noche, sin necesidad de esperar a que se cumplan los 15 días de cerrojazo previstos por la Generalitat y que expiran en la medianoche del viernes 30 de octubre.

Sanidad apunta un incremento de casos

Con todo, el último informe publicado este lunes por el Ministerio de Sanidad destaca que la restauración es el ámbito social el que lidera los brotes de coronavirus y representa el 26,9% de los casos. El documento apunta a bares y restaurantes, aunque también a centros educativos y sanitarios, especialmente hospitales.

De los casos notificados desde el 15 octubre, el departamento que dirige Salvador Illa ha constatado 21 brotes generados en restauración que han desembocado en 163 positivos. No obstante, el gremio detalla que durante los 11 días de cierre de establecimientos activo los casos han seguido al alza. Solo ayer domingo se anotaron casi 5.000, los mismos que hoy lunes.

Alargar el 'delivery'

Por otro lado, la patronal hostelera también reclama alargar hasta las once de la noche el tiempo para reparto a domicilio y recogida de comidas —actualmente hasta las diez—, para dar servicio a quienes acaban de trabajar a las nueve. De hecho, el sector lamenta “los escasos esfuerzos que han hecho las administraciones para compatibilizar la gestión sanitaria de la pandemia y la terrible crisis económica que está generando”.