Foment del Treball ha cargado este lunes contra la intención del Gobierno de subir el IVA a la sanidad privada en los presupuestos generales del Estado. La junta directiva de la patronal catalana ha manifestado su rechazo contra una medida que, considera "ideológica" y que "perjudicaría a todos los ciudadanos, incluidas las familias más vulnerables". Además, alerta de que contribuirá al "colapso" del servicio público.
Según la patronal, un endurecimiento de la fiscalidad agravará el colapso de la sanidad pública y sus listas de espera, además, sostiene que va en contra de los criterios de la Unión Europea. "Va en contra de la necesidad y oportunidad de situar la economía de la vida y las industrias de salud en un sector estratégico de la reconstrucción económica y social y de acceso a los fondos europeos para la recuperación", ha subrayado la presidenta de la Comisión de atención a las personas de Foment, Roser Fernández.
Colapso de la sanidad pública
De hecho, el presidente de Foment, Josep Sánchez Llibre, ya ha exhibido su compromiso ante las adminsitraciones y el Gobierno para evitar que el gravamen se haga efectivo en las próximas cuentas del Estado. La junta directiva de la patronal ha puesto el foco en priorizar los servicios básicos y fundamentales, como la sanidad y la educación.
"Gravar fiscalmente los servicios privados en plena crisis sanitaria y económica colapsará la administración pública", subraya la nota. De hecho, más allá del rechazo de las patronales, también los sindicatos se han mostrado contrarios a aplicar una medida de este tipo. El secretario general de UGT, Pepe Álvarez, reconoció el domingo que "en estos momentos las subidas del IVA no son aconsejables, y menos en estos dos sectores", en referencia a la educación y la sanidad.
Foment ha alertado de que en caso de aplicarse la subida se produciría un aumento de la presión y viabilidad de la sanidad pública en momentos críticos como los actuales. Además, estima que crearía "una sanidad privada elitista solo accesible para pocos segmentos de la población", mientras que otros grupos de población pasarían a la pública agravando las listas de espera.