La caída del turismo en España y el cierre de la hostelería durante el estado de alarma no han beneficiado a Coca-Cola. El mercado español ha pasado de liderar la facturación de ingresos de la marca a ocupar el tercer lugar, por detrás de Alemania y Reino Unido, ambos con ingresos mayores de 1.000 millones de euros. La división ibérica (España, Portugal y Andorra) logran ingresos de 388 millones de euros en el segundo trimestre de 2020, mientras que durante el primer semestre fueron 917 millones.
El descenso de ingresos de España ronda el 50% en el segundo trimestre, mientras que en otros mercados europeos la rebaja no supera el 25% porque su aislamiento no fue tan severo. Por su parte, Cola European Partners, que es la embotelladora europea del refresco, obtuvo un beneficio neto contable de 126 millones de euros durante el primer semestre de este año, lo que supone una caída del 75% respecto al mismo período de 2019.
No esperaban este descenso
Entre enero y junio, el beneficio neto de la compañía cayó un 52% hasta 259 millones de euros, mientras que los ingresos se redujeron un 16,5% hasta 4.837 millones de euros con respecto a los logrados en el primer semestre de 2019. Con respecto al beneficio operativo contable, disminuyó un 63% hasta 268 millones de euros durante los primeros meses de este año 2020. En base comparable se situó en 398 millones de euros, un 48,5% menos.
Sobre la situación que Coca-Cola está experimentando, el consejero delegado de la firma, Damian Gammell, señala: "Esta crisis ha tenido un impacto sin precedentes en nuestro negocio y en las comunidades en la que estamos presentes en toda Europa”. Y añade: "Empezamos el año con fuerza. Estoy orgulloso de la resiliencia de nuestro negocio y de la velocidad con la que hemos sido capaces de responder a los retos que se nos planteaban al empezar el segundo trimestre".
Precavidos de cara al futuro
La incertidumbre del futuro está muy presente para la compañía del popular refresco, que se ha visto claramente afectada por el severo estado de alarma español, que cerró la hostelería durante meses. Los refrescos embotellados, que son los más vendidos en el canal Horeca --canal de distribución para alimentos con un segmento de mercado que concentra hoteles, restaurantes y cafeterías--, perdieron el 85% de sus ventas entre los meses de abril y junio.
Para acelerar la salida de la crisis que la compañía está pasando, Coca-Cola está centrada en aprovechar sus capacidades para impulsar una sólida recuperación durante el segundo semestre del año en las áreas de sostenibilidad y digital con un plan de transformación de la hostelería española. “Seguiremos trabajando para mantener nuestro desempeño, conservar nuestra liquidez y prepararnos para el crecimiento futuro, todo ello apoyado en nuestro sólido balance”, dijo, de forma insistente, Gammell: