El Puerto de Barcelona refuerza su apuesta por el mercado asiático para asegurar su crecimiento durante los próximos años. La entidad ha ultimado una alianza con un puerto asiático para convertirse en su puerta de entrada a Europa.
En la conferencia en línea El Puerto de Barcelona, palanca económica de la recuperación, la presidenta del Puerto de Barcelona, Mercè Conesa, ha explicado que una de las estrategias de la entidad es "fortalecer" los lazos con Asia, dado que el 70% de las importaciones provienen de este continente.
Acuerdo operativo en 2021
En este sentido, ha asegurado que están "avanzando mucho" en alianzas con puertos orientales y que, próximamente, anunciarán el nombre de uno de ellos, que no ha querido desvelar todavía.
"Un puerto asiático invertirá en Barcelona en espacio logístico para gestionar la mercancía que proviene de este puerto", ha dicho, añadiendo que le gustaría cerrar el acuerdo en 2020 y empezar a operar en 2021.
Caída del tráfico por el Covid
Se trataría de un puerto ubicado en una economía que va muy bien y es "muy sólida, un proyecto que, después, sería replicable con otros puertos, ha dicho.
La presidenta del Puerto de Barcelona ha recordado que la entidad sufrió una caída del 17,2% en el tráfico de mercancías en los cinco primeros meses del año y un descenso del 71,8% de pasajeros a causa de la pandemia.
Sin cruceristas
Conesa ha asegurado que esta situación ha tenido un "impacto importante" y que estos meses sin cruceros han supuesto que el puerto deje de ingresar unos 11 millones de euros. La entidad trabaja con un horizonte de recuperación de la actividad a tres años vista y espera un incremento de tráfico para el próximo otoño si se controlan los diferentes brotes.
Asimismo, la presidenta considera lógico que los puertos españoles paguen el impuesto de sociedades por la actividad económica que desarrollan, pero no ve "coherente" que tengan que seguir colaborando con una serie de fondos de contribución portuaria que no van orientados a la competitividad.