Jarro de agua fría del Fondo Monetario Internacional (FMI) sobre la recuperación económica. El organismo ha dibujado un escenario más pesimista para este año y el que viene respecto de sus primeras estimaciones y España sale especialmente mal parada, con una estimación de caída del PIB del 12,8%, el mayor de las economías desarrolladas junto a Italia, con la que comparte pronóstico.
En sus previsiones de primavera, las primeras que analizaban el impacto del coronavirus, el organismo multilateral estimó una caída del PIB del 8% para la economía española en 2020 y una posterior recuperación del 4,3% en 2021, que ahora sitúa en el 6,3%.
Golpe para Francia
El FMI ha sido especialmente duro con España a la hora de revisar sus estimaciones, ya que la caída prevista para 2020 supera en 4,8 puntos porcentuales la que calculó en abril. No obstante, en este capítulo hay un caso más negativo: Francia. Para el PIB galo, el FMI prevé una contracción del 12,5%, ni más ni menos que 5,3 puntos porcentuales más que hace apenas dos meses.
Como ya había adelantado su directora gerente, Kristalina Georgieva, el FMI es sensiblemente más pesimista sobre los efectos del coronavirus en la evolución la economía, principalmente debido a que los periodos de reclusión (con el consiguiente parón de la actividad económica) que se han decretado en los diferentes países para frenar la oleada de contagios ha sido más largo de lo previsto.
El PIB mundial caerá un 4,9%
Además, el organismo también considera que las incertidumbres en torno a una rápida recuperación a partir de la segunda mitad de 2020 o a comienzos de 2021 van en aumento debido a que los temores a posibles rebrotes está provocando una vuelta a la actividad a un ritmo más pausado de lo que había calculado.
Así, las previsiones para la economía mundial contemplan ahora una caída del 4,9%, frente al descenso del 3% anteriormente previsto, y una posterior recuperación del 5,4% en 2021, cuatro décimas de punto porcentual por debajo.
Alemania salva los muebles
El panorama no es mucho más alentador para las economías desarrolladas en su conjunto, para las que el FMI pronostica un desplome del 8% (frente al 6,1% de la estimación anterior) y una recuperación del 4,8% el próximo año, apenas tres décimas más de lo reflejado en las previsiones de primavera. Mientras, el hundimiento de la economía en la zona euro superará el 10%. Sólo Alemania salva de alguna forma los muebles aunque, aun así, el FMI también ha revisado a la baja sus cálculos sobre la evolución de la economía germana, en concreto ocho décimas, hasta el 7,8% en 2020.
En el caso los países que han logrado reducir de forma notable el número de contagios, el FMI señala que, pese a la buen evolución desde el punto de vista sanitario, la vuelta de la actividad no ha sido la prevista debido al mantenimiento de la distancia social, al temor de la población a un repunte de los infectados y a las medidas de seguridad e higiene que han tenido que tomar las empresas, que han repercutido de forma negativa en la productividad.
Deuda disparada
El pronóstico del organismo multilateral también apunta a un notable incremento tanto de los desequilibrios de las cuentas públicas como de los endeudamientos, también como consecuencia de una reclusión demasiado prolongada en el tiempo.
De acuerdo con las estimaciones revisadas, el déficit en España se irá al 13,9% en 2020, 4,4 puntos porcentuales por encima de lo que reflejaba el documento publicado en abril. Mientras, la deuda se disparará hasta el 123,8% del PIB.