Calma chicha entre los administradores concursales. La moratoria aprobada por el Gobierno del plazo para presentar solicitud de concurso voluntario hasta el 31 de diciembre --frente a los dos meses previstos de forma ordinaria--, ha frenado la avalancha de procedimientos concursales vaticinada al inicio del estado de alarma. David Busto, profesional con amplia experiencia como administrador concursal, no detecta un cambio de tendencia: “En un primer momento, las empresas se esperarán un poco. Las presentaciones de concurso no llegarán hasta después del verano”.
El Real Decreto-ley 16/2020 introdujo un segundo escudo empresarial contra los concursos forzosos, prohibiendo su admisión a trámite hasta final de año siempre y cuando se hubieran presentado desde la declaración del estado de alarma. Tras estas medidas, la previsión del Consejo General de Gestores Administrativos y el Registro de Economistas Forenses (Refor), que auguró en abril la quiebra de más de 50.000 sociedades como consecuencia directa de la pandemia, aún tardará en cumplirse.
Los concursos llegarán tarde o temprano
La suspensión de los plazos procesales se levantó el pasado 4 de junio, tras tres meses congelados como consecuencia de la pandemia. Jordi Albiol, responsable del área concursal del despacho DWF-RCD, considera que aunque todavía es temprano para valorarlo. "A medio plazo, la impresión es que los concursos irán en aumento", señala. Que se agote o no la prórroga dependerá de la coyuntura que atraviese cada compañía: "Las empresas que puedan hacerlo, seguramente aguantarán hasta el fin de la moratoria intentando refinanciarse para evitar el concurso".
José Carlos Ojeda, socio de la firma familiar Ojeda Economistes, coincide en que es pronto para saber cómo evolucionará el escenario concursal. Sin embargo, sostiene que es probable que terminen cumpliéndose los peores pronósticos: "Dada la situación que existe en muchas empresas, infracapitalizadas y muy apalancadas, es de esperar que un parón de la actividad devenga en soluciones concursales, o bien consensuadas o, en última instancia, de liquidación".
Aspac pide aplazar la nueva ley concursal
Ante esta situación, Aspac (Asociación Profesional de Administradores Concursales) ha propuesto una batería de medidas para aliviar la sobrecarga judicial. Entre estas, se encuentran la simplificación de la solicitud de declaración de concurso, la creación de nuevos juzgados en aquellos destinos más saturados y el traspaso a los administradores concursales de más funciones. Aunque algunas de estas medidas han sido recogidas por el Ejecutivo, Diego Comendador, presidente de Aspac, se lamenta de que no se haya aplazado la entrada en vigor del nuevo texto refundido de la Ley Concursal.
"Aspac proponía que esta ley no se aprobase o bien que su entrada en vigor se pospusiera un año. Antes de junio de 2021, hay que trasponer la directiva europea de segunda oportunidad, por lo que este texto quedará caduco en pocos meses", afirma Comendador. El portavoz reconoce que el nuevo texto armoniza las 28 reformas que arrastraba la ley, pero advierte que complica la tarea de los profesionales en un momento de gran actividad.