El Banco Central Europeo (BCE) ha cumplido con su promesa de no dejar de regar de liquidez los mercados en el marco de su plan de choque contra la crisis del coronavirus y ha elevado en 600.000 millones de euros su programa de compra de deuda pública y privada que, de esta forma, alcanzará 1,35 billones de euros.
El consejo de gobierno, reunido este jueves, también ha decidido extender el plazo para llevar a cabo las compras hasta, al menos, el mes de junio de 2021. El ritmo de las operaciones se mantendrá en el entorno de los 20.000 millones de euros.
Por encima de lo previsto
La medida del banco emisor ha sido incluso más agresiva de lo previsto por el mercado, que en los últimos días había descontado una ampliación del programa antipandemia por parte del BCE. Sin embargo, las estimaciones estaban en el entorno del medio billón de euros, que se ha visto superada en 100.000 millones adicionales.
La reacción de los mercados no se ha hecho espera. En apenas 10 minutos, los principales índices bursátiles europeos, que hasta entonces perdían en torno al 1%, se han dado la vuelta y han pasado a cotizar en terreno positivo. No obstante, los datos semanales de desempleo en EEUU, que aun siguen reflejando el fuerte impacto de la crisis en la economía estadounidense, han devuelto a las plazas europeas a los números rojos.
Tipos sin cambios
En el caso del mercado de renta fija, la decisión del BCE disparó la compra de bonos por parte de los inversores, lo que provocó una notable rebaja de las primas de riesgo. En el caso de la española, se relajó hasta los 90 puntos básicos.
El consejo de gobierno de la entidad dejó sin cambios los tipos de interés de referencia de la zona euro, en torno al 0%.