A finales de la tarde los rumores sobre el cierre de la planta de Nissan en Barcelona eran muy fuertes. Pero horas antes, el nuevo plan de reestructuración hacía atisbar que miles de trabajadores de la ciudad catalana se iban a ir a la calle. Renault se disparaba sobre el parqué más de un 17%. Cuando abrieron los mercados asiáticos, Nissan hacía lo mismo.
La firma japonesa se revalorizó más de un 8% durante la jornada del jueves y su acción llegaban a superar los 449 yenes, unos 3,70 euros al cambio. Además, durante una hora y media, los títulos estuvieron suspendidos en cotización, una vez que la alianza automovilística explicó el nuevo plan estratégico que llevaba unas consecuencias fatales para los intereses de Barcelona.
Renault sigue subiendo
En las últimas cinco sesiones, la compañía nipona, coincidiendo con los rumores de reestructuración, ha incrementado su valor bursátil un 17%. Los inversores entienden que centralizar sus plantas tendrá réditos a medio y largo plazo.
Renault, por su parte, sigue incrementando su valor en bolsa. La compañía ha llegado a subir alrededor del 3% a primera hora de la jornada, aunque el gran acelerón llegó en la sesión del miércoles cuando la firma se disparó un 17%. Así, el título tiene un valor de 22,92 euros. En la última semana, la automovilística se revaloriza un 35%.
Los analistas aplauden la fusión
Los analistas de Investing.com, destacan que “Nissan acumula ya tres jornadas consecutivas de avances, con el colofón de este miércoles, tras anunciar los detalles del nuevo plan estratégico en su alianza con Renault y Mitsubishi. Un plan que le permitirá mejorar el impacto recibido por el Covid-19 y que confirma la buena voluntad de todas las partes implicadas para retomar la cooperación pese a descartar la fusión”.
Desde Bankinter explican que la nueva reestructuración tiene sentido por varios motivos ya que “ayudan a limar las tensiones dentro de la alianza dando un peso más o menos relevante a cada compañía dependiendo de su posición en diferentes mercados, puede centrarse en la eficiencia y no en el volumen. En el contexto actual la gestión de costes y de la inversión es clave. Y no sólo ahora, el sector auto ya atravesaba una situación complicada antes del coronavirus”.