Caixabank ha dado a conocer la cantidad de dinero que ha dado para fomentar la liquidez tras el decreto del estado de alarma. La entidad financiera asevera que ha concedido 8.000 millones de euros durante los primeros 15 días.
El banco catalán asegura que dicha cantidad ha sido distribuida a grandes empresas, pymes, autónomos y emprendedores.
Pero Caixabank tiene previsto seguir concediendo nuevas líneas de crédito y además recalca que las oficinas han absorbido un total de 90.000 solicitudes para nuevos préstamos por valor de 8.500 millones de euros, habiéndose superado el primer tramo adjudicado de los avales del estado por el ICO.
Medidas del banco
Cabe recordar que la entidad también ha activado una serie de medidas para mejorar la liquidez de sus clientes.
Los clientes pensionistas de Caixabank han visto cómo se avanzaba al día 20 el día del abono de la pensión y cómo se ponía en marcha un plan de atención de manera prioritaria a las personas mayores.
Por otro lado, todos los clientes de la entidad financiera con derecho a prestación por desempleo y que hayan cobrado la misma el mes pasado han podido disponer de esos fondos desde el pasado 3 de abril, siete días antes de lo habitual.
En relación a las viviendas de sus clientes, y además de adherirse a la moratoria hipotecaria planteada por el Gobierno, la compañía condonará a partir de abril las rentas a los inquilinos de viviendas propiedad de su filial inmobiliaria BuildingCenter, si cumplen unas condiciones. Esta medida estará en vigor hasta el mes que se decrete la finalización del periodo de alarma si el mismo tuviese que extenderse.
Nueva líneas
Con relación a la información emitida por Caixabank es conveniente recordar que este viernes, el Consejo de Ministros aprobó la segunda línea de crédito avaladas por el ICO con una nueva aportación de 20.000 millones de euros.
El Ejecutivo indicó que dichos créditos irán destinados a pequeñas y medianas empresas y a los autónomos y que tendrán las mismas condiciones para atender las necesidades de pago de facturas, pagos de salarios etc, en las que se incluyen las derivadas de vencimientos de obligaciones financieras o tributarias. No obstante, como sucedía en la primera líneas, no se podrán reestructurar préstamos, cancelar deudas pretéritas o la amortización de deudas.