En plena crisis del coronavirus, con la actividad económica en mínimos, el sector de la publicidad ha encontrado un hueco en el que seguir creciendo: los influencers. El mayor uso de las redes sociales durante el confinamiento y las plataformas de streaming se han convertido en una herramienta óptima para que el marketing siga creciendo.
Solo en los cuatro primeros días del estado de alarma en España el uso de Whatsapp creció el 62%; el gaming, el 62%; las videoconferencias, el 110% y el streaming en vídeo, un 20%, según datos de Telecom. Es por eso que los influencers se han convertido en una pieza clave para penetrar en un público que se ha volcado en el uso de las redes sociales y la conexión en red.
Escaparate ante las nuevas circunstancias
“Los prescriptores digitales han experimentado un 76% de incremento en el número de 'me gustas' acumulados en sus publicitarios en Instagram en las últimas dos semanas. En TikTok, el crecimiento ha sido de un 27% en interacciones en marzo respecto a febrero. Estos aumentos se producen como consecuencia del incremento en el uso de redes pero, también, en la necesidad del público usuario de redes de mantenerse conectado con otras personas en estos momentos”, señala el CEO de la agencia de marketing H2H, Luis Díaz.
Así, los influencers suponen un escaparate que permite dar normalidad dentro de las nuevas circunstancias y permite seguir proyectando la imagen de la marca en un contexto en el que los presupuestos de publicidad se han reducido ante la situación actual. La ventaja de contar con estos personajes residen en que pueden crear contenido sin salir de casa.
Además, los influencers, por sus características, son un elemento ágil para adaptarse al nuevo ritmo de la sociedad e influir en él. De hecho, el Ministerio de Sanidad contactó con varios de los perfiles más reconocidos en España para convencer a los jóvenes de la necesidad de no salir de sus casas.