El fabricante de cargadores para vehículos Wallbox ha inaugurado una nueva planta de producción en Barcelona con capacidad para 500.000 unidades anuales. La nueva planta, repartida en tres edificios en la Zona Franca, será clave en la expansión internacional de la compañía hacia Estados Unidos, China y Japón.
La planta de Wallbox en Barcelona está dotada de 11.000 metros en la suma de los tres edificios. Además, la compañía ha señalado en una nota que está restaurada con materiales ecoeficientes para eliminar la generación de residuos. El parking contará con 50 puntos de carga eléctrica alimentados con placas solares, así como un área de salud y bienestar dotada de gimnasio, biblioteca y cantina.
La firma ha planteado una nueva etapa de expansión internacional tras comercializar sus productos en 40 países. Para este año, el objetivo es llegar a Estados Unidos, China y Japón. Entre las zonas en las que ya está asentada se encuentran América Latina, Oriente Medio y Asia-Pacífico.
“Nuestro crecimiento es impulsado por el compromiso de crear los mejores
cargadores para vehículos eléctricos. La estructura que nos aporta la nueva sede nos permitirá seguir creciendo y convertir nuestro propósito en realidad”, ha apuntado el CEO de Wallbox, Enric Asunción.