El Ayuntamiento de Barcelona ha comunicado de forma oficial este miércoles la adjudicación de licencias de motosharing a 21 empresas que se habían presentado al concurso correspondiente. El consistorio ha licitado 6.958 permisos para motos y ciclomotores eléctricos, tras lo que las empresas tendrán 10 días hábiles para presentar la documentación necesaria.
Fuentes de las adjudicatarias han explicado que están satisfechos con la decisión municipal, por la que el Ayuntamiento "confirma la apuesta por un modelo que favorece a los emprendedores" para poder operar en este nuevo servicio de movilidad, que destacan como abierto y participativo.
Críticas por "inviabilidad"
La notificación se trata de un trámite que estaba previsto tras la primera adjudicación que se realizó el pasado 7 de octubre. Asimismo, desde las adjudicatarias señalan que una de las empresas se ha retirado, lo que permitirá elevar el número de motos a 348 a cada compañía.
Asimismo, algunos de los operadores han criticado la limitación promovida por el Ayuntamiento por la "inviabilidad" que genera en el servicio. No obstante, han mostrado su "confianza" en el consistorio "hasta ver cómo queda el reparto final".
Algunas de las compañías afectadas han asegurado que la decisión municipal no gusta a grandes operadores nacionales e internacionales "que hasta ahora venían prestando el servicio de forma alegal". Se acusa a estas grandes corporaciones de aplicar una estrategia de desgaste hacia competidores tachándolos de insolventes, porque los grandes temen ver afectadas sus ganancias "al tener una competencia real".