La dirección de Continental Automotive ha comunicado a los representantes de los trabajadores su intención de presentar un Expediente de Regulación de Empleo sobre la totalidad de los 760 que integran la plantilla. La decisión implicará el cierre de la planta a consecuencia de que por el momento no se ha avanzado en las negociaciones para traspasar la fábrica a otras compañías interesadas.
La decisión de la plantilla ha sido avanzada por CCOO, que ha manifestado su preocupación por la gestión del proceso de venta de la planta, que la empresa comunicó el pasado diciembre. Ahora, Continental ha afirmado que presentará el ERE el próximo 5 de febrero si no logra encontrar comprador.
Críticas de los sindicatos
Desde el área de Industria de CCOO han instado a la dirección de la empresa a avanzar las negociaciones para resolver la situación y garantizar la continuidad de los puestos de trabajo. Asimismo, el sindicato se ha comprometido a analizar la documentación relativa al ERE para garantizar las mejores condiciones para la plantilla.
El anuncio del ERE llega dos días antes de la segunda jornada de huelga, que tendrá lugar el viernes 24 de enero, tras el paro que tuvo lugar la semana pasada. El objetivo de las reclamaciones de los trabajadores es instar a la dirección a mover ficha y acelerar la búsqueda de comprador.
"Ajustes" de las plantas
Continental ha justificado su decisión de vender la fábrica de Rubí en la apuesta por la movilidad eléctrica que ha hecho la multinacional alemana, y que requiere "ajustes" en producción en varias plantas distribuidas por diferentes puntos del mundo y que afectarán a algo más de 5.000 trabajadores.
La fábrica catalana, que los sindicatos defienden como "perfectamente solvente", ensambla básicamente pantallas y controles analógicos para la industria de la automoción.