La cadena de tiendas especializadas en alimentos congelados La Sirena, sigue inmersa en su expansión y cerrará el año con cuatro nuevas aperturas en la provincia de Barcelona. Concretamente, en las localidades de Masnou, Montornés del Vallés, Malgrat de Mar y Vilanova del Cami. Con estos nuevos establecimientos, que han supuesto una inversión cercana al millón de euros y 12 nuevos empleos directos, La Sirena afianza su posicionamiento en Cataluña, uno de sus principales mercados, donde suma más de 200 locales y alrededor del 25% de la cuota del sector.
A estas aperturas en Barcelona se suma también una nueva en las Islas Baleares, donde la compañía ya tenía una presencia destacable gracias a su estrecha colaboración con la cadena de Supermercados Binipreu. La nueva tienda se abrirá en Ibiza en las próximas semanas y operará en régimen de franquicia.
Plan estratégico
La cadena española de alimentos congelados continúa así con la puesta en práctica de su plan de crecimiento, alcanzando el final de año, con la apertura de todos los centros proyectados, un total de 250, de los cuales cuatro han sido en nuevos mercados y el resto en ciudades en las que ya tenía presencia.
Todas las aperturas forman parte de ese plan estratégico de la cadena, con el que La Sirena espera abrir más de 50 tiendas en España en los próximos cinco años.
Cinco ejes
Esta nueva etapa de La Sirena tiene foco en cinco ejes: innovación en producto y surtido, orientación al cliente, desarrollo de Zona Centro, mejora de la productividad y estrategia multicanal.
"Esta expansión va en línea con la nueva etapa de la compañía y nuestro plan estratégico, que nos ha permitido batir nuestras previsiones y crecer por encima del mercado en este año. Creemos que hay grandes oportunidades en ciudades medianas y, con estas aperturas, demostramos nuestra apuesta por ello. Partimos, sin duda, de una posición muy sólida para crecer", señala Jorge Benlloch, consejero delegado del grupo.