Jaume Giró Ribas (Badalona, 1964) pondrá fin en dos semanas a su etapa directiva en el grupo La Caixa después de más de una década en la que ha desempeñado funciones ejecutivas de máxima relevancia. La retirada voluntaria obedece al interés por iniciar un nuevo ciclo profesional de carácter independiente y se produce una vez concluido el plan estratégico 2016-2019 de la Fundación Bancaria La Caixa con el que se había comprometido.
La formalización de su retirada tendrá lugar a finales de diciembre y de manera acordada, aunque la decisión es anterior, de finales del pasado verano. En aquel momento, Giró comunicó su decisión al presidente, Isidro Fainé, con quien pactó mantenerse en la dirección general de la Fundación Bancaria La Caixa hasta concluir el ejercicio, según ha podido confirmar este medio con ambos protagonistas. El movimiento será notificado hoy al patronato de la fundación.
Jaume Giró deja la Fundació La Caixa / CG
Once años en el grupo
El periodista y gestor ha ocupado la dirección general de la Fundación durante seis años, justo desde que en 2014 las normativas europeas obligaron a separar la gestión del banco (Caixabank) de la entidad en la que residían la mayoría de sus acciones (Fundación Bancaria) y participaciones empresariales. Durante su trayectoria, la fundación sin ánimo de lucro ha cosechado una alta notoriedad y ha sido reconocida como el paraguas patrimonial del holding, además de la herramienta que administra la mayor obra social de la Europa accidental. Con anterioridad, a su llegada al grupo en 2009 procedente de Repsol, Giró ejerció como director ejecutivo de comunicación de La Caixa y después como director general adjunto de CaixaBank.
A instancias de este medio, Jaume Giró ha confirmado que a partir de 2020 pretende dedicarse de manera preferente a la consultoría y asesoría en comunicación, pero que ejercerá esta actividad en un sentido más amplio y transversal. Su salida guardaría relación con esta vocación de interactuar con el mundo económico, político y social español gracias a su valiosa cartera de relaciones forjada durante más de dos décadas de trayectoria profesional en el universo del grupo empresarial de La Caixa.
Del periodismo a la energía y las finanzas
Giró es licenciado en Ciencias de la Información por la Universidad de Navarra y en Administración y Dirección de Empresas por Esade. Inició sus colaboraciones periodísticas en La Vanguardia y Diario de Navarra hasta incorporarse en 1987 como redactor a Europa Press y dirigir la sección de economía en Barcelona.
En 1990 inició el periplo por la comunicación corporativa al fichar como jefe de comunicación de Catalana de Gas, liderada entonces por el añorado empresario Pere Duran Farell, de quien Giró heredó un enorme interés por el humanismo y su aplicación y reflejo en el mundo de la empresa. Vivió la fusión por absorción de Gas Madrid por Catalana de Gas y el alumbramiento de Gas Natural (la actual Naturgy), a cuyo comité de dirección se incorporó a los 32 años.
Tras 14 años en la gasística, y siguiendo la estela de Antoni Brufau, entonces uno de los hombres fuertes de la compañía catalana, aterrizó en Repsol YPF tras la salida de Alfonso Cortina de la presidencia y la llegada de Brufau. En esa etapa en la capital de España perfeccionó su relación con el mundo empresarial en general y energético en particular al ocupar la presidencia de Petrocat y ejercer como consejero de Petronor, ambas sociedades filiales de Repsol.
Una fundación más moderna
Su etapa al frente de la fundación bancaria no sólo ha cumplido con los compromisos del plan estratégico de la institución (una inversión superior a los 2.000 millones de euros en obra social durante cuatro años), sino que ha posibilitado su modernización en términos de gestión empresarial, así como en la optimización de los recursos administrados. Los objetivos del plan estratégico 2016-2019, que en su día aprobó la comisión ejecutiva y el patronato de la Fundación, se han alcanzado y en resumen pretendían mejorar el ratio de eficiencia (recursos destinados directamente a programas, no a gastos de personal y administrativos), que pasa del 16% al 10,5%; poner en marcha sistemas externos e independientes de evaluación de los programas para medir su impacto real; reducir y concentrar las actividades para que tengan efecto social transformador; y apostar decididamente por la inversión en ciencia e investigación, como palanca para asegurar el bienestar de las futuras generaciones.
Durante ese periodo ha trabajado en estrecha alianza y sintonía con Fainé, con quien sólo mantuvo una discreta discrepancia en los primeros días de octubre de 2017. En aquel momento, los órganos de gobierno dilucidaban sobre el traslado de la sede social de la Fundación Bancaria a Palma de Mallorca, una vez que se había decidido que Caixabank movía su domicilio a Valencia. Giró defendió la permanencia en Barcelona de la Fundación Bancaria (en esos momentos dependía del protectorado de fundaciones del Ministerio de Economía y la Fundación no estaba ni está en los mercados financieros ni tiene accionistas) al considerar que existían razones tanto históricas como de carácter práctico que hacían innecesario aquel movimiento, en contra del presidente y del resto de los patrones. Fundación Bancaria La Caixa es la primera de España y la tercera del mundo por activos (solo superada por la de Bill y Melinda Gates y la Wellcome Trust).
Giró ha compatibilizado su máxima responsabilidad en la institución bancaria con una serie de cargos en diferentes ámbitos (relaciones institucionales, públicas, comunicación y mundo empresarial), entre los que destaca el liderazgo de la asociación Dircom en Cataluña, la presidencia de Corporate Excellence, la del foro de debate Barcelona Tribuna, la vicepresidencia de la Sociedad Económica Barcelonesa de Amigos del País, la presidencia del mecenazgo del Gran Teatre del Liceu o la más reciente comisión de estrategia de Criteria Caixacorp.
Hombre del presidente en la sombra
Durante todo este tiempo en el grupo La Caixa, Giró ha sido la sombra del presidente. Ambos profesionales han mantenido una estrecha relación en la que la complicidad y la asesoría les ha permitido mantener un vínculo permanente que ambos confiesan proyectar y mantener de forma personal en el futuro.
La institución deberá determinar ahora cómo se produce la sustitución para sacar adelante los planes estratégicos acordados por sus patronos a partir de 2020. Fainé puede optar por un relevo en clave interna o el fichaje de un profesional externo. La opción más probable en estos momentos es que la responsabilidad ejecutiva de la entidad la asuma Antonio Vila Bertrán (Barcelona, 1949), quien ocupa el cargo de adjunto al presidente desde septiembre pasado.
Su nombramiento será examinado en la reunión del patronato para que el relevo sea automático y evitar así un vacío de poder en la Fundación Bancaria La Caixa. Vila es un profesional con amplia experiencia en el grupo financiero. No en vano ha sido presidente de Microbank y de Caixabank Consumer Finance.