Norwegian Air Shuttle musculará la operativa entre Barcelona y Estados Unidos (EEUU) tras bajar la persiana de su base en Madrid. La aerolínea escandinava aumentará un 12% su capacidad en las cinco conexiones de verano entre la ciudad condal y Nueva York, Los Ángeles, San Francisco, Miami y Chicago el próximo verano.
La operadora ha dado cuenta del incremento del número de plazas en una nota pública hoy martes. Ha avanzado que comercializará un total de 462.000 plazas en vuelos entre el aeropuerto de El Prat y los cinco aeródromos de las urbes mencionadas. Ello supone un avance del 12% en la capacidad respecto a la campaña estival de 2019 y un máximo histórico. Hay más. El guarismo lleva a Norwegian a copar el 40% de la oferta de conexiones entre la capital catalana y EEUU. En el terreno de la propia compañía, Estados Unidos asciende a primer lugar en el ránking de mercados desde Barcelona.
Refuerzo de rutas
La modificación de operativa se desglosa en crecimientos mayores en las rutas con menos pasajeros que opera Norwegian entre la segunda mayor ciudad española y EEUU. La aerolínea de bajo coste ampliará un 28% las plazas a Miami/Fort Lauderdale hasta las 53.000; un 22% a San Francisco para llegar a 76.000 y un 21% a Chicago para alcanzar las 68.000. En los dos enlaces con más capacidad, Nueva York/JKF y Los Ángeles, el aumento será menor, del 4% y 6%, respectivamente, para llegar a los 144.000 y 121.00 asientos, siempre en temporada alta.
Alfons Claver, director de Relaciones Institucionales de Norwegian en España ha subrayado que "en los últimos meses, Norwegian ha llevado a cabo una revisión exhaustiva de sus operaciones globales de largo radio. La compañía observa una gran demanda de rutas entre las principales ciudades de Europa, como Barcelona, Londres, París y Roma, a varios destinos en los Estados Unidos". Es por ello, según el directivo, que "aumenta el número de salidas en varias de estas rutas: ofrece ahora cerca de 50 rutas entre Europa y Estados Unidos y es la aerolínea extranjera con mayor volumen de tráfico en Nueva York”.
ERE temporal en Madrid-Barajas
El refuerzo de la operativa de Norwegian en Barcelona llega después del tijeretazo dado por la compañía en otros aeropuertos nacionales, empezando por Adolfo Suárez Madrid-Barajas. En la capital, la aerolínea ha acordado un expediente temporal de regulación de empleo (ERE) tras anunciar el cierre de esta base. Inicialmente la operadora planteó aplicar un ERE, pero finalmente ha cerrado con los sindicatos una entente por la cual 99 tripulantes de cabina (TCP) cobrarán 500 euros entre diciembre y marzo como medida extraordinaria. Después, serán recolocados en otras bases con compensación por traslado. Otros 140 TCP del resto de España también entrarán en el pacto, aunque con compensaciones menores.
El cierre de la presencia permanente en Madrid forma parte de una restructuración de la operativa de la compañía aérea en España. Además de esta plaza, la aerolínea de bajo coste ha echado el cerrojo a las bases de Gran Canaria, Palma de Mallorca y Tenerife. Se enmarcan estas decisiones en la rentabilidad, además el impacto sobre la cuenta de resultados de la compañía de la parálisis y revisión de los Boeing 737 MAX --Norwegian es el principal cliente de este aparato en Europa--, el incremento de costes de combustible y el repunte de la competencia.