Tras una prueba de dos años, Nike ha decidido poner punto y final a su etapa en Amazon. La multinacional deportiva dejará de vender sus productos a través del gigante del comercio electrónico y apostará por incrementar su propio canal de venta directa y sin intermediarios.
La decisión de Nike, de la que ha informado CNBC, se produce después de que ambas compañías acordaran en 2017 iniciar una prueba piloto para lograr un seguimiento más eficaz a la distribución de falsificaciones y ventas no autorizadas. No obstante, la firma deportiva ha decidido volver a su política inicial de comercializar sus productos a través de su propia plataforma.
Cambios internos en Nike
El cambio de rumbo de Nike llega tras el nombramiento de John Donahoe --que ya fue CEO de eBay y es presidente de PayPal-- como próximo consejero delegado de la multinacional. Un 30% de las ventas anuales de la firma se produce a través del canal directo. Además, en el año fiscal que terminó el pasado mayo, las ventas sumaron 11.800 millones de dólares, con un aumento del 35% de las transferencias en línea, frente al incremento del 6% de las tiendas.
La salida de Nike se produce un momento de desaceleración en Amazon. La compañía de Jeff Bezos se dejaba un 26% del beneficio en el primer trimestre del año con respecto a 2018. En concreto, la firma ganó 1.920 millones de euros, mientras justificaba la desaceleración por las fuertes inversiones en la creación de un sistema de reparto propio.