Tener un máster o postgrado puede proporcionar mayores oportunidades de encontrar trabajo y un sueldo mayor. El nivel formativo es uno de los factores que inciden en las empresas a la hora de contratar a sus empleados. Y también en determinar su salario. Cuanto mayor es la formación, más posibilidades hay de que éste sea más alto. Aunque, paradójicamente, apenas el 1,4% de las ofertas en nuestro país demandan estas titulaciones: un 0,3% menos que hace un año, y el 2% menos que hace dos.
Así, un trabajador con máster o postgrado en España cobra 12.114 euros más de media que uno con estudios básicos o sin estudios, según revela el IX informe Infoempleo-Spring Professional sobre postgrados con más empleabilidad.
Sueldo promedio de 30.000 euros
Los datos del salario promedio según el nivel de formación muestran que un titulado con máster o postgrado cobra de media 29.706 euros. Más, incluso, que un doctorado (23.386), y también que un licenciado, diplomado o grado universitario (25.445). Mientras que los trabajadores con un ciclo formativo de grado superior o medio (FP) se hallan en la franja de los 21.496 y 18.703 euros, respectivamente. Por debajo de ellos, un bachiller o equivalente percibe de media 18.503 euros, un empleado sin estudios, 17.562 y, por último, los titulados en educación secundaria obligatoria o graduado escolar, con 16.523.
En nuestro país, los estudios de postgrado son un elemento diferenciador en la empleabilidad de un candidato. Y depende en gran medida del grado de responsabilidad del puesto de trabajo ofertado.
Valor diferencial para universitarios
Así, la media del 1,4% de toda la oferta de empleo nacional que solicita tener másters o postgrados en el currículum se dispara cuando nos centramos en ofertas dirigidas a candidatos con formación universitaria, donde se considera un generador de valor diferencial para la candidatura. En este caso, asciende al 35,2%, si bien un año antes llegó a ser del 39,2%.
De hecho, estos estudios son a veces la única vía de acceso para determinados puestos de trabajo, ya sea por la naturaleza del perfil buscado o por razones legales, como el requerimiento de una certificación específica para ejercer la profesión. Es el caso de abogados, ciertos educadores, arquitectos o ingenieros, por ejemplo.
"Esfuerzo y voluntad de aprender"
Los expertos en selección reconocen que, aunque no es imprescindible, tener este tipo de estudios ayuda. “La formación de postgrado es importante a la hora de diferenciarse de los demás candidatos que están optando al mismo puesto, porque demuestra unas competencias y aptitudes que orientan al seleccionador sobre el perfil del entrevistado: cultura de esfuerzo, voluntad de aprender o adaptación al cambio, así como las habilidades adquiridas en este tipo de formación que son casi más determinantes que el propio contenido educativo”, señala Alexandra Andrade, directora de Spring Professional.
Saber acertar con el máster o postgrado que nos conviene también es importante, debido a la “inmensa” oferta existente: ”Contamos con un gran abanico de universidades, escuelas de negocio y centros formativos que ofrecen desde programas muy generalistas a otros más especializados. Conocer su historia, trayectoria y reputación, valorar el contenido de sus programas y el claustro de profesores, contactar con el colectivo de alumni y analizar las diferentes salidas profesionales para las que habilitan son algunas de las claves que hay que tener en cuenta antes de tomar la decisión”, apunta Jorge Guelbenzu, director general de Infoempleo.
Importancia por sectores
Por sectores, las empresas vinculadas con la enseñanza y formación son este año las que más valoran que los candidatos cuenten con formación de postgrado, requisito que aparece en el 20,8% de su oferta de empleo. Lo cual supone un aumento de 0,9 puntos porcentuales respecto al año anterior). Tras este sector aparece calidad y medioambiente (14,9%) y asesoría jurídica (14,5%).
Por lo que respecta a las profesiones en las que la demanda postgrados más ha aumentado, destaca el sector de la investigación, donde ha pasado del 1,5% de 2017 al 7,9% de 2018 (+6,4%). Y, tras él, siguen otros como el de agencias de comunicación (con un 5,8%; el 4,3% más en un año), el aeronáutico (5,3%; +4%), las ingenierías (5,2%; +3,2%), internet (4,9%; +2,5%) o consultoría informática y/o telecomunicaciones (4,7%; +3,2%). También es remarcable el aumento de esta demanda de formación en el sector publicitario (4,7%; +3,4%) y en el de obras públicas (4,5%; +3,2%).
El caso de los MBA
Por lo que respecta a los MBA (Master of Business Administration), más de la mitad de las ofertas vinculadas al sector de la información y asesoramiento (56%) y al sector audiovisual (55,1%) pide este tipo de formación superior. El sector de la auditoría también se ve afectado por esta tendencia, ya que el 49,3% de sus ofertas de empleo requiere este tipo de másters en administración y dirección de empresas.
En cambio, otros sectores prefieren estudios de postgrado focalizados en otras materias más específicas de esa área, como es el caso del ámbito de la publicidad (88,4%), el de la enseñanza y formación (88,3%) y el de cosmética y belleza (87,7%).
A mayor categoría profesional, más solicitados
La categoría profesional y la experiencia laboral son factores que intervienen de forma decisiva en la valoración de los estudios de postgrado.
Así, en vacantes en las que se busca cubrir puestos de responsabilidad, la tasa de ofertas que los piden es superior al resto: casi en el 17% de las destinadas a directivos piden esta formación, mientras que en el caso de los empleados es del 1,2%.
La explicación de la diferencia de demanda viene dada por las propias funciones que desempeña cada categoría profesional. Para directivos y mandos intermedios se valoran principalmente programas que doten de conocimientos de gestión y dirección, mientras que para técnicos se solicitan programas especializados en la realización de las tareas que deben desempeñar. Para la categoría de empleados se buscan otros valores en el desarrollo profesional que no pasan necesariamente por la formación de postgrado, de ahí que sea un requisito apenas presente en la oferta.
Así, el MBA se exige en el 47,7% de las propuestas para cargos directivos, mientras que para técnicos sólo se pide en el 16% de ellas. En esta última categoría se valoran otras temáticas a estudiar durante el postgrado.
Dentro de la categoría de directivos, el postgrado es más demandado en aquellas ofertas dirigidas al director de área educativa (54,3%), al director de desarrollo de Recursos Humanos (46,7%), al director de medioambiente (44,8%) y al subdirector general (39%).
Para la categoría de mandos intermedios, esta titulación es necesaria para optar al puesto de jefe de asesoría fiscal (43,7%), al de jefe de auditoria (35%), al jefe de prevención de riesgos laborales (28,7%) y al responsable de SMO (21,6%).
En perfiles técnicos, el postgrado se solicita, sobre todo, para ser especialista en SEO (58,4%), investigador i+D (51,3%), trafficker (50%) y abogado (36,2%).
Por último, en la categoría de empleados, el postgrado es necesario para optar a puestos como el de entrenador (6,8%), repostero (1,6%), operador de sistemas y redes (0,8%) y monitor (0,8%).
Andalucía supera a Cataluña
Por autonomías, la Comunidad de Madrid (6,3%), Andalucía (5,4%) y Cataluña (5,1%) ocupan las primeras posiciones en cuanto a las regiones que más valoran la titulación de postgrado, a pesar de perder fuerza en comparación con el ejercicio anterior (-1,9%, -1,8%, y -2,8%, respectivamente).
Andalucía adelantó en 2018 a la comunidad catalana, puesto que el año anterior ambas comunidades tuvieron unos índices de 7,2% y 7,9%, respectivamente.