La cadena de comida rápida Viena cerró 2018 con un beneficio de explotación de 5,8 millones, un 7,4% más que en el año anterior. Además, la firma logró un récord de facturación con 84,4 millones de euros, lo que supone un incremento del 6,2% más que en 2017.

El incremento de los resultados, de los que informa Expansión, tiene lugar tras una inyección de capital de 10,5 millones de euros con los que se han abierto nuevos locales y se han reformado otros. Tras abrir seis nuevos establecimientos, la compañía cuenta ahora con un total de 57, todos en Cataluña, excepto dos en Valencia y dos en Andorra.

Previsión de crecimiento

Por otra parte, la plantilla está integrada por 1.751 trabajadores que se distribuyen entre los restaurantes y las plantas de cárnicas, pan y logística. Asimismo, antes de finales de año, la empresa pretende abrir dos locales más en la calle Córcega y en el paseo de Sant Joan de Barcelona.

Las previsiones de la firma de comida rápida pasan por un incremento de las ventas en los resultados de 2019. Así, confían en elevar la facturación hasta los 90 millones de euros con el empuje de las nuevas aperturas.