La Generalitat vuelve a salvar a Vallter 2000 de la quiebra

La estación de esquí Vallter 2000 recibirá un nuevo balón de oxígeno económico de la Generalitat que le evitará caer en el concurso de acreedores. Así se plantea en la nueva operación que se deberá cerrar antes del inicio de la temporada alta del emplazamiento: el refuerzo de los fondos propios de la sociedad que explota la infraestructura con la inyección de 7,74 millones de euros.

Vallter SA emitirá nuevas acciones por este importe máximo, cifra que incluirá los 5,9 millones hasta 2021 de inversión, mediante títulos de 0,06 euros de valor nominal. La sociedad tiene dos accionistas. Ferrocarrils de la Generalitat (FGC) y Salvador Serra SA, que poseen el 75,7% y el 23,8%. Esta compañía, radicada en Porqueres (Girona), es una constructora fundada en 1977 por los hermanos Pere y Josep Serra. Este último es actualmente el presidente de la estación de esquí.

Reducción de capital

Antes del refuerzo de los fondos propios, Vallter SA realizará una reducción de su capital social de casi 2,94 millones de euros. Se amortizará el valor nominal de las acciones hasta dejarlas a un precio de derribo, de 0,41 euros a 0,06 euros. Todo ello, para reconocer las pérdidas que el grupo ha arrastrado a lo largo de los últimos cinco años y que obligan a la operación acordeón actual para recomponer la situación patrimonial.

La infraestructura, que da empleo a 14 personas, está en números rojos desde, al menos, 2013. En ese ejercicio perdió 964.729 euros, cifra que se logró reducir hasta los 781.320 euros en 2014. La depreciación tocó techo un año después, cuando se disparó hasta cerrar con una cifra negativa de 1.143.128 euros.

Pérdidas acumuladas

En 2016, la minusvalía rozó de nuevo el millón de euros. Se quedó en los -950.262 euros, casi el mismo resultado que se registró en el último año en que se han llevado las cuentas al Registro Mercantil. Vallter SA perdió 936.480 euros en 2017. Ni siquiera se consiguió equiparar con los ingresos, ya que se quedaron en los 792.585 euros.

La situación de Vallter 2000 es la de una empresa que año tras año cierra sus cuentas con unos gastos superiores a los ingresos, hecho que ya constituiría una situación de quiebra técnica para la estación de esquí y de montaña situada en Setcases (Girona) que la Generalitat remediará con cargo a su presupuesto. Dado el descuadre, los socios se ven forzados de forma recurrente a realizar aportaciones en forma de ampliación de capital.

Otros ‘rescates’ de la Generalitat

No es la primera ocasión en que el Gobierno catalán salva de la quiebra a Vallter 2000. FGC aprobó a finales de 2014 una inyección de fondos de 3,4 millones, dos años antes de que desembolsara otros 2,4 millones para mantener a flote las instalaciones. Fue en ese momento cuando la empresa pública de la Generalitat tomó el control mayoritario de la compañía.

La operación acordeón de este verano se anuncia casi un año después de que el Ejecutivo ampliara hasta 2036 el contrato de concesión de la pista de esquí. Además, el pasado marzo informó del programa de inversiones para mejorar el recinto. Se espera que la reforma y modernización de las pistas y el intento de conseguir más público en verano aumenten la caja de Vallter 2000.

El Govern garantiza su viabilidad durante los próximos 17 años. El gran reto es conseguir atajar las pérdidas de una vez por todas.