Miquel y Costas ha anunciado este jueves en su junta general ordinaria de accionistas que invertirá 50 millones de euros entre el ejercicio en curso y 2020. Será la planta de Mislata (Valencia) la que se lleve el refuerzo económico más destacado, un total de 10 millones de euros.
El objetivo final de la iniciativa de la familia Mercader será incrementar en un 10% la capacidad productiva del grupo industrial papelero. Para ello también destinará siete millones a las mejoras tecnológicas de la planta de Besós (Barcelona); otros 1,5 millones a comprar maquinaria y automatizar procesos en Capellades (Barcelona) y otros dos millones para las infraestructuras y la mejora del impacto medioambiental de la factoría de Tortosa (Tarragona).
Economía circular
El plan de inversión también beneficiará a la fábrica de la Pobla de Claramunt (Barcelona), que se llevará otros 2,5 millones. El primer tramo de esta aportación, de 1,5 millones, se destinará a fomentar proyectos de economía circular en el centro, será el proyecto más destacado que se abordará en este territorio. La filial Clariana, con sede en Villareal (Castellón), recibirá 800.000 euros para impulsar proyectos de eficiencia energética.
En 2020, el grupo industrial presidido por Jordi Mercader Miró señala que desembolsará siete millones en ampliar sus instalaciones en el polígono de Barquera, en Capellades (Barcelona) y que inyectará 10 millones más en Tortosa (Tarragona). En esta ocasión, para implementar una nueva tecnología que recuperará un subproducto químico que se usa en la fabricación de papel en este centro, el llamado licor negro.
Voluntad de crecimiento
Todo ello, según los responsables del grupo, es una muestra de la “voluntad de crecimiento”, en palabras de su presidente. Incluso ha abierto la puerta a reforzar la plantilla, que actualmente está fijada en 887 personas.
Miquel y Costas está dirigida por el hijo del presidente, Jordi Mercader Barata, un ejecutivo que ocupa los cargos de director general y vicepresidente en la compañía. El secretario general es Javier Basañez, que también ha participado como es habitual en la junta y en el tradicional encuentro previo con los medios.
La empresa del papel de fumar
La papelera facturó 259,3 millones de euros en 2018, el 6,7% más que el ejercicio precedente y el resultado neto alcanzó los 37,3 millones, el 0,6% más. La fabricación de papel que se usa para liar cigarrillos se mantiene como el producto estrella de la firma industrial catalana.