Es el fraude masivo en Glovo, donde algunos repartidores realquilan sus cuentas a jóvenes que necesitan deseperadamente el dinero. Éstos trabajan sin cobertura legal alguna --la cuota de autónomo la paga el titular y, a ellos, no les cubre--, sin la formación laboral en circulación y tráfico y sin gozar del seguro laboral que ofrece la plataforma. Tal y como lo hacía Pujan, el joven nepalí que murió atropellado por un camión en Barcelona el sábado
Uno de ellos es Carlos. Este joven de L'Hospitalet de Llobregat (Barcelona) se anuncia en internet para trabajar cuentas ajenas de Glovo. En conversación con este medio, no pone condición alguna. "Las condiciones las pone usted. Yo prometo trabajar todo lo que pueda porque necesito el dinero ahora mismo", admite. ¿Cuánto es todo lo que pueda? "Si la aplicación está activa 13 horas como dice, pues trece horas. Necesitaría solo media hora para comer. De lunes a domingo, por supuesto", enumera el trabajador latino. "Yo le daría a usted un porcentaje de la facturación, un 30%. La bicicleta la pondría yo: es de mi hermana", agrega.
"¿Qué puntuación tiene? Necesito dinero"
La cara más oscura de las empresas de reparto a domicilio, las start ups cuyos repartidores autónomos te llevan a casa desde las llaves que olvidaste hasta un menú de sushi para cenar también la pone Carlos. Este joven venezolano afincado en Madrid se ofrece también para repartir por el centro de la capital. ¿Cómo? "Yo quiero trabajar tanto como sea posible, pero si tú estás dispuesto podemos hacer mitad de jornada y mitad de jornada", concede. ¿Incluye ello fines de semana? "Sí, por supuesto", añade. Este joven se muestra especialmente preocupado por el nivel. ¿A qué se refiere? "Cuanta más puntuación tiene un repartidor más repartos te llevas. Envíame una captura de pantalla por Whatsapp de tu puntuación y hablamos", explica.
Carlos también pregunta sobre "cuánto estás facturando actualmente". Quiere decir con ello cuánto dinero se puede sacar con la cuenta de Glovo del titular. De la cifra total, el repartidor realquilado aportará entre el 20% y el 30% al titular de la misma. No habla de porcentajes Henry. Este valenciano recién llegado a España emplaza a "pactar unas condiciones entre tú y yo". Se anuncia para repartir de forma ilícita con una cuenta de la firma fundada Oscar Pierre y Sacha Michaud. "Yo trabajaría de lunes a viernes. Si tú tienes una bici, en bici está bien", reconoce.
Glovo: "Desactivamos cuentas fraudulentas"
En relación a estos tres casos, o el de Pujan, que repartía con realquiler de cuenta en Glovo hasta que falleció en Barcelona el sábado tras ser arrollado por un camión de la basura, una portavoz de la empresa explicó ayer en conversación con este medio que "Glovo introduce mejoras continuamente en la aplicación. Entre éstas figuran avances para detectar cuentas alquiladas. Desde mayo hemos desactivado, y se hace de forma permanente, un total de 17". Ha agregado la misma fuente que "las cuentas operadas por personas no titulares no gozan de la formación sobre circulación o tráfico o del seguro de la plataforma". ¿Cómo detectan cuentas realquiladas? "Tanto los establecimientos como los usuarios lo pueden denunciar. Glovo ha incorporado este sistema", ha enfatizado.
No obtante, las cuentas realquiladas de Glovo siguen existiendo. Así lo atestiguan decenas de anuncios en internet, lo denuncia la plataforma RidersxDerechos y lo admite la start up, con la que el joven nepalí de 22 años estaba trabajando hasta que fue embestido por un camión de la basura en la Ciudad Condal el sábado. Su trágica muerte ha generado un alud de protestas y condenas de los sindicatos UGT y CCOO. La empresa ha anunciado que activará el seguro de incidencia, pese a que el joven repartidor operaba de forma fraudulenta la cuenta con la que repartía.