"Las grandes deciciones tomadas en 2018, con el reposicionamiento de tarifas y la renuncia al fútbol, han impactado fuertemente en nuestros resultados, pero confiamos en que en la segunda mitad de 2019 se puedan empezar a ver ya resultados positivos", reconocía Antonio Coimbra, CEO de Vodafone España durante la comparecencia ante los medios para comentar los resultados del año fiscal de la empresa británica de telecomunicaciones, del 1 de abril de 2018 al 31 de marzo de 2019.
Doce meses en los que, como consecuencia de esas dos decisiones estratégicas, Vodafone reducía un 6,4% los ingresos por servicio, hasta 4.275 millones de euros. La operadora entraba en 'números rojos', con unas pérdidas operativas netas de 170 millones de euros frente a un beneficio operativo neto de 163 millones entre abril de 2017 y marzo de 2018.
Impacto de las tarifas de terminación móvil
En esta línea, la compañía añade que los ingresos por servicio en su último ejercicio fiscal se redujeron un 5,3% incluyendo el impacto de las tarifas de terminación móvil, mientras que los ingresos totales descendieron un 5,5%, hasta los 4.688 millones de euros.
En el cuarto trimestre de su año fiscal, los ingresos por servicio alcanzaron los 1.014 millones de euros, un 8,9% menos (un 8,3% incluyendo el impacto de las tarifas de terminación móvil), mientras que los ingresos totales bajaron un 8,6%, hasta los 1.102 millones de euros.
Optimismo con las ilimitables y llegada del 5G
A partir de aquí, Coimbra mostraba cierto optimismo al ver los primeros resultados arrojados por la entrada en funcionamiento de las nuevas tarifas ilimitables de datos. "Hemos percibido cómo en las tres primeras semanas, la operadora ha captado 90.000 líneas, cuadruplicado el uso de datos y aumentado un 50% el porcentaje de accesos a la red", cuantificaba Coimbra.
De cara al futuro, Coimbra anunciaba que Vodafone lanzará el 5G este verano en seis ciudades españolas, para multiplicar por 10 la velocidad, al igual que la capacidad de red y, de esta manera, multiplicar por cien los dispositivos conectados. "Habíamos hablado de 2020, pero al final hemos decidido adelantarnos para que España sea pionera en 5G en Europa", señalaba.
Suma de iniciativas estratégicas
La llegada del 5G en verano se sumará a las "importantes iniciativas estratégicas" tomadas en los últimos meses, orientadas a preparar a la compañía para competir con éxito en todos los segmentos del mercado.
Iniciativas que responden a la voluntad de ser "plenamente competitivos en un nuevo entorno de mercado en el que tienen un peso creciente las ofertas de bajo y medio valor", pero sin renunciar a reforzar su oferta a los clientes de alto valor, para lo cual ha resideñado su oferta de televisión y convergente, ha lanzado tarifas móviles ilimitadas y ha presentado su nueva marca Vodafone Bit.
Ampliación del acuerdo con Orange
La nueva estrategia también apuesta por la evolución tecnológica y la necesidad de desplegar de forma más eficiente las redes de nueva generación, en la que se enmarca su ampliación del acuerdo con Orange para la compartición y el despliegue de redes anunciado en abril. En este sentido, Vodafone counicaba que, a 31 de marzo de 2019 su oferta de fibra llegaba a 22,4 millones de hogares entre despliegues propios y compartidos y acuerdos mayoristas.
Otros principios son la necesidad, por un lado, de avanzar en la digitalización de la compañía para impulsar la interacción digital con sus abonados y, por otro, de asesorar y acompañar a sus clientes empresariales en su propia digitalización; y la necesidad de cambiar la organización para responder de una forma más sencilla y ágil a las expectativas de los clientes, para lo cual llevó a cabo en el primer trimestre un Expediente de Regulación de Empleo.