El pleno del Parlamento Europeo ha aprobado este martes la reforma que obligará a los nuevos vehículos a estar equipados con nuevas tecnologías que mejorarán sus sistemas de seguridad a partir de mayo de 2022. Entre ellos, los asistentes de velocidad inteligentes, el frenado de emergencia avanzado, las alertas de somnolencia o abandono involuntario de carril, y los cinturones de seguridad mejorados.
Las nuevas normas han sido aprobadas por 578 votos a favor, 30 en contra y 25 abstenciones, y ahora necesitan el vistobueno formal de los 28 para convertirse en legislación. Su objetivo es establecer los requisitos obligatorios que se aplicarán dentro de tres años a turismos, furgonetas, camiones y autobuses. Además de los ya citados, otros ejemplos similares serán la instalación de cámaras o sensores para la marcha atrás segura y las cajas negras que registren datos en caso de accidente.
Cómo funciona
Los coches que se vendan en la Unión Europea (UE) a partir de mayo de 2022 deberán, por tanto, llevar instalado un asistente de velocidad inteligente. Un dispositivo que se extenderá a todo el parque móvil de la UE en 2024, y con el que se pretende reducir la mortalidad vial en un 20%.
Este sistema alertará al conductor si se excede de los límites de velocidad, y tendrá la opción de ser desactivado. Es decir, el asistente de velocidad inteligente no limitará la velocidad del vehículo, sino que su función será informar, a través de receptores sensoriales, que se ha superado el límite de velocidad aplicable.
La DGT aplaude la idea
La Dirección General de Tráfico (DGT) de España valora de forma muy positiva la decisión de la Eurocámara de obligar a los nuevos vehículos que se vendan a partir de 2022 en la UE a incorporar el limitador de velocidad inteligente, algo que a su juicio contribuirá a "minimizar" los errores humanos.
El llamado Asistente Inteligente de Velocidad (ISA, por sus siglas en inglés) para vehículos ligeros será uno de los 30 nuevos sistemas que existirán para reducir los accidentes.
La DGT considera que en la estrategia de seguridad vial se debe asumir que el factor humano sigue presente en la siniestralidad en carreteras, por lo que los vehículos e infraestructuras deben dirigirse hacia un sistema que "aminore" esos errores humanos.
Menos accidentes
La Asociación Española de Fabricantes de Automóviles y Camiones (Anfac) ha recordado que el exceso de velocidad supone hasta un tercio de los accidentes mortales de tráfico. Y valora que el asistente de velocidad inteligente puede evitar de forma activa que los conductores excedan los límites permitidos, mediante el uso de cámaras de reconocimiento de las señales de tráfico y bases de datos sobre los límites de velocidad vinculados a señal GPS. Según Anfac, estos sistemas, combinados con otros, contribuirán a reducir los accidentes.
La asociación ha apuntado además que, según algunos estudios, la combinación del asistente de velocidad inteligente con el Control Electrónico de Estabilidad puede reducir las víctimas mortales por exceso de velocidad entre un 5,2 % y un 8,7 %.
La DGT, por su parte, apuesta también por carreteras "más amigables", que contribuyan a que los errores humanos queden minimizados en la siniestralidad.
Camiones y autobuses
Las reglas revisadas prevén también requisitos específicos para camiones y autobuses, tales como sistemas que mejoren la visión directa y eliminen los ángulos muertos.
Los nuevos dispositivos de seguridad pasarán a ser obligatorios a partir de mayo de 2022, excepto este sistema de visión directa para los camiones y autobuses, y la ampliación de la zona de impacto en la cabeza en turismos y furgonetas, que se introducirán posteriormente debido a los cambios estructurales de diseño que precisan.
Según la Comisión Europea, solo en 2018 fallecieron 25.000 personas en las carreteras de la UE, mientras 35.000 sufrieron heridas graves. En España murieron 39 personas por cada millón de habitantes por este motivo el año pasado.