La empresa de comida a domicilio Deliveroo destaca que ha generado alrededor de 100 millones de euros en el año 2018 en España. Basa esta cifra en el informe Contribuyendo a la economía global que elabora la empresa Capital Economics. La multinacional publica el documento en el que reivindica su fortaleza mientras, de forma paralela, se enfrenta a una crisis laboral por su modelo de negocio.
Igual que el resto de grupos de reparto que han aparecido en los últimos años, está en el foco por las contrataciones de trabajadores autónomos que hacen de repartidores para ellos. Ya ha habido varias sentencias al respecto y algunas están a favor de las compañías mientras que otras dan la razón a los llamados riders, sin que ninguna haya sentado jurisprudencia.
Puestos de trabajo
Según el documento que ha salido a la luz este lunes, Deliveroo ha generado 2.100 puestos de trabajo en España entre noviembre de 2017 y el mismo mes de 2018. Este número refleja las contrataciones que se han hecho en los restaurantes y sus cadenas de suministro como consecuencia de su colaboración con la plataforma.
Es decir, no se contemplan los puestos creados por la empresa de forma directa, ni tampoco los 1.500 riders autónomos, que son la cara más visible de su negocio, pero no están contratados como plantilla.
Los 'riders'
La compañía británica trabaja con repartidores que no son personal fijo y que se dedican a levar la comida de los restaurantes a las casas de los clientes. El conflicto laboral parte del momento en que estos empleados han reivindicado pasar a ser personal fijo de los grupos. No siempre se han salido con la suya. Como se ha mencionado con anterioridad, ciertos tribunales no les han dado la razón mientras que otros los han considerado "falsos autónomos", ya que dedican toda su jornada a trabajar para firmas como Deliveroo, Glovo o UberEats. En algunos casos, incluso prestan servicios a varias compañías de forma simultánea.
El informe insiste en que la corporación británica ha abonado alrededor de 1,6 millones de euros en contribuciones a la Seguridad Social. No obstante, no deja claro qué parte de esa cifra corresponde a las aportaciones de los repartidores.