Borja Prado dejará de ser presidente de Endesa en la próxima junta de accionistas, cuando se ratifique en el cargo al todavía desconocido sucesor. Y lo hará dejando unos beneficios de 1.417 millones de euros en el ejercicio 2018, con una caída del 3% con respecto al ejercicio anterior, aunque por encima de su objetivo de ganancias para el año de 1.400 millones de euros, según informó la multinacional energética.
Para justificar esa merma de las ganancias, el grupo lo achacaba a la dotación de pérdidas por deterioro para la central de Alcudia, decisión adoptada tras analizar las actuales condiciones regulatorias y de mercado que han afectado a la vida útil de la planta. Excluyendo esta dotación, el beneficio neto ordinario, creció un 4%, hasta los 1.511 millones de euros.
Ingresos de 20.195 millones, como en 2017
Los ingresos de la energética en 2018 ascendieron a 20.195 millones de euros, prácticamente en línea con los 20.057 millones de euros registrados el año anterior. Por su parte, el resultado bruto de explotación (Ebitda) del grupo se situó en los 3.627 millones de euros a cierre del año, con un crecimiento del 2%, mientras que el beneficio operativo (Ebit) fue de 1.919 millones de euros, un 6% menos.
Endesa alcanzó así los objetivos que había anunciado al mercado para el ejercicio 2018 de un beneficio neto en torno a unos 1.400 millones de euros y un Ebitda en torno a los 3.500 millones de euros.
Altos precios en el mercado mayorista
La compañía señaló que ha alcanzado estos resultados en un contexto caracterizado por los elevados precios de las materias primas energéticas y el alza significativa de los precios del CO2, lo que ha dado lugar, a su vez, a altos precios en el mercado mayorista, a pesar de que la generación hidráulica ha alcanzado en España niveles superiores a la media de los diez últimos años y de que la producción eólica se ha incrementado en un 40%.
El consejero delegado de Endesa, José Bogas, destacó que los resultados del ejercicio 2018 demuestran "la capacidad de la compañía para realizar una gestión eficaz de sus negocios.
Asimismo, subrayó que Endesa ha puesto en este 2018 "las bases para mantener la solidez de su negocio en el futuro, gracias, entre otras cosas, al esfuerzo inversor realizado en capacidad renovable". Además, el grupo intensificará este esfuerzo en 2019, con la puesta en marcha de 879 MW de nueva potencia renovable.
Un 3% más de dividendo
Por otra parte, la compañía propondrá a la próxima junta general de accionistas, prevista para el 12 de abril, el pago de un dividendo bruto con cargo al resultado ordinario neto del ejercicio 2018 de 1,427 euros por acción ('payout del 100%'), lo que supone incrementar un 3% el dividendo realizado con cargo a los resultados de 2017.
Además, esta retribución para el accionista será un 7% superior al dividendo mínimo de 1,33 euros por título que se anunció al mercado para 2018.
La junta general de accionistas de Endesa celebrada el pasado mes de abril acordó la distribución de un dividendo total por un importe bruto de 1,382 euros por acción con cargo al resultado del ejercicio 2017. Esto representa un total de 1.463 millones de euros.