La contratación indefinida a mayores de 45 años registró en 2018 la cifra más elevada en 12 años, con más de 370.500 contratos, un 17,9% más que en 2017. Así lo recoge un informe de Randstad en el que se analizan los datos del Servicio Empleo Público Estatal (SEPE) comprendidos entre 2006 y 2018.

Tras subir un 11% en 2007, los contratos fijos firmados por mayores de 45 años descendieron más de un 42% durante cuatro años consecutivos, hasta registrar la cifra más baja en 2011 (128.388 contratos). Desde ese ejercicio la tendencia cambió, y se lograron encadenar siete años consecutivos de aumentos hasta 2018. En otras palabras, uno de cada cuatro contratos indefinidos que se firmaron el año pasado fueron para mayores de 45 años.

Más mayores y menos jóvenes trabajando 

El fuerte repunte que este tipo de contratos experimentó el año pasado se debe, según Randstad, al hecho de que en 2018 se hicieron más contratos de todo tipo que nunca. Además, la pirámide laboral en España se está invirtiendo: son menos los jóvenes que entran en el mercado, por lo que cobran más peso los trabajadores de más de 45 años, que cada vez cuentan con un nivel de cualificación más elevado.

El sector servicios fue el principal impulsor de la contratación fija para mayores de 45 años, al concentrar el 76,7% del total de contratos indefinidos firmados por este colectivo. Le sigue la industria, con el 8,8% del total; la construcción, con el 7,6%, y la agricultura, con el 7%. El mayor aumento de estos contratos en los mayores de 45 años lo experimentó la agricultura, con un repunte del 57% sobre 2017, seguido de la construcción (+19,8%), la industria (+18,5%) y el sector servicios (+15%).

Madrid y Cataluña, a la cabeza

En valores absolutos, Madrid lideró la contratación indefinida para mayores de 45 años con 83.836 contratos firmados. No se queda corta Cataluña, que le pisa los talones en segunda posición (72.009). A distancia, y ocupando el tercer lugar en pódium (37.581), aparece la Comunidad Valenciana.

Si comparamos los datos con los del año anterior, Murcia es la comunidad autónoma que más crece en 2018, con un 41,7%. Le siguen Castilla-La Mancha, Baleares y País Vasco, todas ellas con crecimientos superiores al 23%. En el otro extremo, con los menores incrementos, se situaron Madrid (+13,9%), Asturias (+13,2%), Navarra (+12,3%), La Rioja (+6,4%) y Extremadura (+3,6%).