Octavio Granado, el secretario de Estado de la Seguridad Social, sigue poniendo encima de la mesa la cruda realidad de la viabilidad futura del sistema público de pensiones, con cada vez más pensionistas y un número de empleados insuficiente, y con salarios bajos que difícilmente cubrirán el pago de las jubilaciones.
En ese sentido, advierte Granado de que, a partir del año 2023 o 2025 habrá que empezar a "buscar dinero" para reponer las cantidades del Fondo de Reserva y ha abogado por que las cuotas a la Seguridad Social se destinen exclusivamente a las pensiones, así como por reservar puestos de trabajo para los parados de larga duración de más de 55 años.
Así lo ha señalado en una entrevista en Antena 3 en la que ha explicado que aunque la 'hucha' de las pensiones se "engordó" para gastarla en las jubilaciones de la generación del 'babyboom', los nacidos en los años 50 y 60, ya se ha gastado ese dinero, por lo que desde 2023 o 2025 habrá que empezar a "buscar dinero" para reponer lo gastado en el fondo.
3.000 millones de otras prestaciones
Además, se ha mostrado partidario de que todo el dinero de las cuotas a la Seguridad Social se dedique a pagar las pensiones, y el resto de partidas que se sufragan actualmente a través de las cuotas, como la baja por paternidad, que suponen casi 3.000 millones de euros al año, se financie a través de los Presupuestos del Estado.
"Pedimos que desde el Estado se haga un esfuerzo para pagar esas políticas que la Seguridad Social financia con cuotas y necesitan algún respaldo mayor", ha enfatizado Granado, en referencia a partidas que se destinan a formación de trabajadores, subsidios no contributivos para parados, reducciones de cuota de agrarios o autónomos o tarifas planas, que "si tuvieran financiación en los Presupuestos, la Seguridad Social tendría más holgura para pagar sus pensiones".
Otros 3.000 millones del Fondo para la 'extra' de Navidad
En cuanto a los 3.000 millones de euros que el Gobierno extraerá del Fondo de Reserva para hacer frente a la paga 'extra' de Navidad de las pensiones, Granado ha reconocido que por "desgracia" tienen que recurrir a la 'hucha', ya que en los PGE de 2018 no estaban previstos los ingresos necesarios para sufragar las pensiones, ya que la última subida "se pactó en el vacío". No obstante, ha apuntado que la previsión del Gobierno de Rajoy era gastar 5.000 millones, pero el Ejecutivo actual contempla 3.000 millones.
Igualmente, Granado ha abogado por "intentar" que el sistema fiscal permita que hasta los trabajadores con baja remuneración tengan algún incentivo real para ahorrar.
Jubilaciones forzosas
También ha apostado por que se tengan en cuenta todos los indicadores que mejor garanticen el poder adquisitivo para la revalorización de las pensiones, como el PIB, y ha subrayado que "para pagar buenas pensiones, se necesitan buenos salarios".
Respecto a las jubilaciones forzosas anunciadas por el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha aclarado que "forzosamente no se va a jubilar a nadie", pero las empresas "van a intentar renovar plantilla" de forma que cuando una persona llegue a la edad de jubilación, no se le obligará a cobrar la pensión, sino que la empresa le transmitirá que no necesita sus servicios y contratará a otra persona, pero quedará "libre" para buscar otro empleo.
A este respecto, ha defendido que el hecho de que las personas mayores trabajen "no quiere decir que lo hagan ocupando los puestos de trabajo que necesitan los jóvenes", con los que "hay que ser solidarios", porque son los que pagarán las pensiones. "Si no se les deja hueco, luego nos quejaremos", ha añadido.
Simplicación de los contratos
Sobre otra de las medidas anunciadas por Sánchez esta semana, referida a la simplificación de los contratos a tres (temporal, fijo y de formación), Granado ha dicho que cualquier simplificación es "buena", ya que modalidades como el contrato de emprendedores "no ha servido para que emprenda mucha gente, sino para disfrazar otras modalidades".
Respecto a la reducción de bonificaciones, ha sostenido que cuanto menor es el número de gente a la que les afectan, resultan más útiles, y ha citado a colectivos como el de los discapacitados, las mujeres víctimas de violencia de género, los jóvenes o los parados de larga duración como los que mantendrán estas bonificaciones.
Sobre estos últimos, los parados de larga duración, ha dicho que se necesita ir perfilando que algunos trabajos sean realizados solo por ellos. "Una persona que ha cumplido con una vida laboral ejemplar y con 55 años es despedido, deberíamos buscarles un trabajo", ha apostillado.
"Muy probablemente las administraciones públicas debamos perfilar una serie de puestos de trabajo para que estén ocupados sistemáticamente por esas personas", ha insistido.
Para ello, ha precisado que 3.000 trabajadores de servicios público de empleo van a dedicarse a personalizar las necesidades de trabajo de los parados y a encontrarles un empleo, aunque ha avisado de que los trabajadores de la Seguridad Social están "sobrecargadísimos" de trabajo. Por ello, "nos gustaría retribuirles mejor y darles ayuda, no pueden hacer el doble de trabajo siendo los mismos", ha apuntado.
Los autónomos deben pagar más
Por último, sobre la subida de las cuotas a los autónomos que ultima el Gobierno, ha pedido a este colectivo que hagan una reflexión: "Es necesario pagar más para tener una mejor protección".
En este sentido, ha asegurado que las propias organizaciones de autónomos están de acuerdo en subir las bases de cotización porque si las cuotas suben un 4% o un 5% y los salarios este año van a subir "un 2% o un 3%, con un alza del SMI del 22% previsto, y sus cotizaciones suben solo un 1%, sus pensiones cada vez serán más bajas en relación al resto de trabajadores.
Así, ha recordado que las pensiones medias de los autónomos alcanza apenas los 800 euros frente a los 1.400 de media del resto de trabajadores, por esa diferencia en el pago de cotizaciones.
El secretario de Estado de la Seguridad Social también ha advertido de que en algunos lugares de España hay "decenas de miles de puestos de trabajo que no se cubren", por ejemplo en Burgos hay una necesidad de 600 o 700 personas para conducción en un año, pero quedan vacantes por falta de personal. Ante esta carencia los 3.000 nuevos orientadores en servicios públicos de empleo intentarán "encajar" parados con los puestos libre