Ryanair, la aeronáutica ‘low cost’ dirigida por Michael O’Leary, acepta todos los órdagos en los que está inmerso por las continuas protestas de sus empleados por la condiciones en las que prestan sus servicios.
Así, acaba de anunciar la presentación inmediata de un recurso tras la sentencia de un juzgado de Santa Cruz de Tenerife que defiende la competencia de los tribunales españoles para revisar las relaciones laborales de los de sus empleados que trabajan en bases de este país. "Hemos pedido a nuestros abogados que recurran esta sentencia de forma inmediata", han señalado fuentes de Ryanair.
Recurso de un piloto
El Juzgado de lo Social Número 6 de Santa Cruz de Tenerife ha estimado parcialmente el recurso presentado por un piloto contra Ryanair, DAC y la empresa Brookfield Aviation International por el que se reconoce su relación laboral con la aerolínea irlandesa.
Contra esta sentencia cabe recurso ante la Sala del mismo orden del Tribunal Superior de Justicia de Canarias (TSJC).
La sentencia condena a esas sociedades al pago de 26.584 euros brutos en concepto de salarios devengados entre mayo y junio de 2016, más un incremento del 10% de demora.
Uniforme e identificación de la compañía
La juez sostiene que la relación contractual entre las partes "es de naturaleza laboral" dado que el piloto vestía uniforme completo de la compañía, contaba con identificación acreditativa y debía someterse al horario de vuelos impuesto por la empresa, que organizaba el trabajo.
Por tanto, el actor estaba sujeto a una jornada y un horario que debía desarrollar en un concreto de centro de trabajo", recoge la sentencia, que no es firme y apunta también que como capitán de base no tenía facultades disciplinarias, pues dependían de la aerolínea en exclusiva.
Contratos mediante sociedades fuera de España
La compañía tiene a los pilotos contratados bajo diferentes modalidades y condiciones laborales: contratos directos firmados con Ryanair, contratos realizados a través de brókers (intermediarios), o mediante sociedades fuera de España a modo de autoempleo (self employed), sin vinculación laboral con la empresa.
La 'low cost' irlandesa liderada por Michael O'Leary justifica su oposición a su estructura empresarial y a su sede en Irlanda, que le ha generado ser la mayor 'low cost' de Europa. De esta forma, alega que únicamente los tribunales irlandeses son competentes para revisar las relaciones laborales o mercantiles de la aerolínea.