Nextdoor, la app que quiere explotar la ‘economía colaborativa’ en los barrios

Después de haber arraigado en EEUU, y de haberse implantado en varios países europeos, aterriza en España una nueva aplicación móvil. Se trata de Nextdoor, una app gratuita norteamericana que asegura tener como objetivo la dinamización de la vida de los distritos residenciales fomentando la comunicación e interrelación de sus habitantes. Ya sea compartiendo informaciones, recomendaciones, eventos e intercambios, hasta facilitando la compraventa de productos y servicios, en algo que se parece mucho en lo que ahora se ha dado en llamar economía colaborativa.

La nueva red social opera en la actualidad en más de 200.000 vecindarios de EEUU y de Europa, continente al que dio el salto en 2016 desplegándose primero en países como Reino Unido y Holanda, posteriormente en Alemania, o ya este mismo 2018, en Francia.

Vídeo de introducción de Nextdoor

Datos de identidad reales

Esta especie de Facebook para barrios, como popularmente se le conoce, empieza ahora a desarrollar su implantación en España. Para registrarse en Nextdoor, el usuario debe facilitar su dirección y sus datos de identidad reales -nombre, e-mail...-, que serán verificados por la compañía antes de facilitar el código de activación de la cuenta. "No se trata de compartir estados personales, intercambiar fotos o selfies", subraya su creador, Nirav Tolia, sino de proporcionar información de utilidad. En buena parte de los casos, se trata de ofertas y demandas de productos y servicios.

A diferencia de la red de Mark Zuckerberg, en este caso no hay amigos, ni seguidores, sino solo los vecinos de la zona, con sus nombres y direcciones reales (completas, o bien parciales, si se elige esta última opción). Algo que, como se aprecia en la imagen inferior, ha generado las quejas de usuarios por considerarlo demasiado intrusivo para la privacidad.

Queja de algunos usuarios en el Facebook de Nextdoor

Quejas de algunos usuarios en el Facebook de Nextdoor

Buzoneo y 'embajadores' de barrios

En algunos barrios de Barcelona, Nextdoor ha iniciado una campaña de buzoneo enviando dípticos en los que se proporciona un código de invitación para activar una cuenta nueva en un plazo máximo de siete días. Con ese código, y añadiendo tan solo el del distrito en el formulario de la web, la plataforma ya detecta automáticamente el nombre y el domicilio del receptor de la carta. A continuación, se culmina un rápido proceso de registro. Una vez finalizado, el usuario ya puede acceder a su timeline, donde aparecen todos los posts publicados por sus vecinos. En él puede verse desde quién pone a la venta su coche, alquila su plaza de parking o recomienda a un cristalero, hasta quién se ofrece para dar clases particulares o trabajar de canguro.

Para guiar a sus usuarios, Nextdoor utiliza en su web un curioso sistema de "embajadores de barrios", que son las personas que, en cada zona, ayudan a los recién llegados a resover sus dudas y a utilizar la plataforma. Habitualmente, suelen ser personas activas o conocidas en su comunidad. Y se encargan de moderar foros, verificar informaciones y miembros, entre otras cuestiones.

Original de San Francisco

La versión escritorio y la app de Nextdoor

Versión escritorio y de la app Nextdoor

Nextdoor fue fundada en San Francisco en 2011 por Sarah Leary y Nirav Tolia, su actual CEO. Dos emprendedores con más de 20 años de experiencia, durante los cuales han trabajado en empresas tecnológicas punteras como Microsoft, en el caso de la primera, o Yahoo!, el segundo.

Desde que inició su actividad hace ya siete años, Nextdoor ha recaudado cerca de 300 millones de dólares de financiación, buena parte de ellos procedentes de inversores de Silicon Valley. Según Le Monde, para su crecimiento en Europa, Canadá y América Latina, a finales de 2017 destinó 75 millones de su recaudación.