Los repartidores de la compañía de entrega a domicilio Glovo en Cataluña vuelven a la carga. El próximo jueves, 19 de julio, denunciarán su condición de falsos autónomos mantenida por la empresa ante la Prefectura de Inspección de Trabajo de la comunidad.
Esta denuncia surge después de que la institución catalana diera la razón a los riders de Deliveroo a principios de mes. Treball condenó a la empresa a incluir a su plantilla en la Seguridad Social como trabajadores por cuenta ajena y a ingresar en ella 1,3 millones en concepto de cuotas no abonadas anteriormente.
Relación de carácter laboral
Los trabajadores de Glovo aseguran, al igual que defendían los de Deliveroo, que la relación que mantienen con la empresa es de aspecto laboral y no mercantil, la cual es la que se atribuye a los trabajadores autónomos.
Respaldan esta acusación con la imposición de la empresa respecto a las condiciones de prestación del servicio, configuración de los horarios de los repartidores y sus periodos de descanso, entre otras cuestiones.
Cerca de 4.000 ‘riders’
Según las informaciones proporcionadas por el Colectivo Ronda, responsable de la confección de la denuncia y defensora de los derechos laborales de los repartidores a domicilio, Glovo tendría contratados unos 4.000 riders en Barcelona. Por ello, prevé que la multa que Inspecció de Treball imponga a la empresa de origen catalán --siempre que falle a favor de los trabajadores-- sea también superior a la interpuesta a Deliveroo, cuya plantilla rondaba el tercio de la de Glovo.
La denuncia será interpuesta tanto por los trabajadores, a través de la plataforma RidersxDerechos, como por la Intersindical Alternativa de Catalunya (IAC), con el respaldo del Colectivo Ronda.