Las islas Baleares y Barcelona son los lugares con las tasas turísticas más altas de España y se encuentran entre las más elevadas de la Unión Europea, según el buscador de viajes liligo.
La situación de Barcelona es especialmente llamativa, ya que cuenta con una tasa turística distinta que la que se aplica al resto de la comunidad autónoma. La capital catalana cobra 2,25 euros de tasa por persona y día para aquellos que alquilan un apartamento turístico, mientras que fuera de ella la tasa es únicamente de 90 céntimos, una diferencia de 1,35 euros.
Hospedarse en hoteles en Cataluña
La mayor diferencia de tasa turística entre Barcelona y el resto de Cataluña se encuentra en los hoteles de tres o menos estrellas. En la Ciudad Condal el coste es de dos euros mientras que fuera de ella es de 0,45 euros, una diferencia de 1,55 euros por persona y día.
Los hoteles de cuatro estrellas tienen una variación de 20 céntimos (1,10 euros en Barcelona y 90 céntimos en el resto del territorio) y en los de cinco estrellas el impuesto no varía dentro o fuera de la capital, situándose en los 2,25 euros.
Impuesto turístico en Baleares
A comienzos de año, las Islas Baleares duplicaron la cuantía de la tasa turística, reforma con la cual se espera recaudar 120 millones de euros por año, según informa Europa Press.
Mallorca, Menorca, Ibiza y Formentera cuentan con tarifas que van desde los cuatro euros por persona y noche en hoteles de cinco estrellas, tres euros para los de cuatro, dos euros para los de dos y tres estrellas y un euro para hostales, pensiones, posadas y otras infraestructuras turísticas. Aquellos visitantes que se hospedan en apartamentos turísticos pagan entre cuatro y dos euros.
Alemania y Holanda, los más caros de Europa
En Alemania, cada estado tiene su propia tasa turística. En Berlín y Colonia supone el 5% del total de la factura del alojamiento; en Hamburgo las tasas varían entre los 0,50 céntimos y los cuatro euros dependiendo del tipo de alojamiento y en Múnich no aplican tasa turística.
En Holanda utilizan el criterio porcentual, aunque en cada ciudad es diferente. Tanto en Ámsterdam como en Utrecht, por ejemplo, se rigen por una tasa única del 5% del total de la factura; en Eindhoven este impuesto es del 3,5% y en Rotterdam de 4,5%.