La fuga empresarial más relevante de este viernes 25 de mayo, además de otras seis que se detallan en una noticia aparte, tiene de protagonista a la compañía Telespazio Ibérica. Está especializada en nuevas tecnologías aplicadas al territorio. En particular, ofrece datos cartográficos y soluciones informáticas que combinan sistemas de información geográficos, todo ello con un alto valor añadido.

Telespazio Ibérica realiza fuertes dispendios en investigación y desarrollo y ha participado en numerosos programas europeos espaciales. La compañía nació con el nombre de Aurensis a partir de la fusión realizada en 2003, entre la ingeniería madrileña Auxiliar de Recursos Energéticos (Aurensa) y la catalana Sysigsa. Esta última era producto de la asociación del Instituto Cartográfico de Cataluña y la multinacional Nixdorf. Tras la integración, se acordó establecer la sede en Barcelona, hasta hoy.

De Aurensis a Telespazio

Aurensis trabajó en la solución de grandes desastres ambientales como el desbordamiento de la presa de Aznalcóllar, los vertidos del petrolero Prestige y el impacto en el territorio del AVE. En 2008, Aurensis se integró en el grupo italiano Telespazio, uno de los líderes europeos en actividades geo-espaciales, y más tarde adoptó su denominación.

La compañía transalpina factura 600 millones de euros anuales, tiene presencia en 25 países y cuenta con cuatro centros espaciales. Uno de ellos, Fucino Space Center, que tiene 160 antenas, es el recinto de telecomunicaciones de uso civil más importante del mundo. En conjunto, emplea a 2.500 personas de muy alta cualificación.

Nuevas oficinas

La filial española tiene entre sus clientes a Aguas de Barcelona, Autoridad Portuaria de Barcelona, Canal de Isabel II, Cepsa, Enagás,  Fira de Barcelona, Gas Natural, la Generalitat, Gestamp Renovables, Iberdrola, Iberia, Repsol, así como a las principales compañías telefónicas, varias diputaciones provinciales y gobiernos autonómicos.

Hace justo un año, Telespazio inauguró sus nuevas oficinas de Madrid, en la calle Julián Camarillo nº 4. El Boletín Oficial del Registro Mercantil informa hoy de que dicho inmueble pasa a albergar su sede social para España, en detrimento de la oficina barcelonesa, sita en la calle Rosa Sensat. Cataluña pierde de esta forma otra compañía vanguardista, generadora de un gran valor añadido y con una plantilla de primera fila.