Sanmy, el fabricante catalán de gaseosas obtiene un 26% de sus ventas de la importación y distribución de marcas de terceras empresas, españolas y extranjeras, estrategia que comenzó a utilizar en tiempos de crisis. Cinco años atrás, dejaron de ser únicamente fabricantes para dedicarse también a la distribución de productos capaces de “revolucionar el lineal del supermercado”, según la directora general de Sanmy, Pilar Puértolas.
Expansión publica hoy que gracias a esta apuesta, la compañía ha logrado duplicar sus ventas desde 2012, al pasar de facturar 5,7 millones de euros a 11,3 millones en 2017, lo que implica un crecimiento del 14%.
Productos diferenciales
Hasta el momento la estrategia de ha centrado en la distribución de bebidas energéticas y funcionales pero la idea es dar un paso más entrando también en la importación de marcas de cervezas internacionales que tengan algún componente diferencial.
Con vistas a 2020, Sanmy también quiere aprovechar su potencial logístico y su red de clientes para introducir marcas de productos alimentarios extranjeros para completar la oferta de los alimentos étnicos, un nicho de mercado creciente.