Repsol obtuvo un beneficio neto de 610 millones de euros en el primer trimestre de 2018, un 11,5% menos que en el mismo periodo del año anterior, debido a la menor valoración de sus inventarios, según ha comunicado la empresa a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV).



El beneficio neto ajustado, el que mide la marcha de los negocios al margen del resto de consideraciones, se situó en 616 millones, un 8,1% más que en el mismo periodo del año anterior, mientras que el beneficio bruto de explotación (ebitda) fue de 1.804 millones, un 2,2% menos, aunque el ajustado fue de 1.816 millones, un 4,9% más.

Más producción

Repsol incrementó su producción de hidrocarburos en los primeros tres meses del año hasta alcanzar los 727.00 barriles equivalentes de petróleo al día, la mayor producción desde 2012.

Por áreas de negocio, la actividad de upstream (exploración y producción) logró un beneficio neto ajustado de 320 millones, un 42,9% más.

Por divisiones de negocio

En el área de downstream (refino y comercialización), el resultado neto ajustado ascendió a 425 millones, un 15% menos, debido a la menor actividad por las paradas de mantenimiento de las refinerías de Puertollano (Ciudad Real), Tarragona y Sines, en Portugal.



La deuda neta de Repsol se redujo en el trimestre un 18,1%, hasta los 6.836 millones, con respecto al mismo periodo del año pasado, aunque fue superior en 569 millones a la del cierre del cuarto trimestre de 2017, debido a la realización de operaciones de mercado con acciones por la reducción de capital propuesta a la próxima junta de accionistas.