El Banco Santander obtuvo un beneficio neto de 2.054 millones de euros en el primer trimestre del año, lo que supone un 10% más que el año anterior, gracias al tirón de varios mercados en los que opera como Brasil, España y México.

Excluido el efecto de los tipos de cambio, el aumento del beneficio atribuido fue del 22%. El banco tiene su foco puesto en la vinculación de los clientes, lo que permitió seguir mejorando la calidad y la recurrencia de los resultados.

La fidelidad

Los clientes vinculados, que son aquellos que consideran a Santander su banco principal, aumentaron en 3,3 millones, hasta 18,8 millones, desde el primer trimestre de 2017.

Los ingresos crecieron un 11% en el primer trimestre en euros constantes, hasta 12.151 millones, con un aumento del margen de intereses y de los ingresos por comisiones del 11% y del 14%, respectivamente. El crédito y los recursos aumentaron un 13% y un 16%, respectivamente, en euros constantes.

Diversificación geográfica

La diversificación geográfica "sigue siendo una de las grandes fortalezas de Santander", ya que en el primer trimestre el beneficio aumentó en ocho de sus diez mercados principales, según explica la propia entidad en la información que ha remitido a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV).



El ratio de morosidad del grupo cayó hasta el 4,02%, con una rebaja de 135 puntos básicos desde la integración del Banco Popular en junio de 2017.