La fuga de depósitos de Cataluña provocada tras el referéndum secesionista del 1 de octubre ascendió a 31.399 millones de euros en el último trimestre de 2017.
Sgún los datos publicados por el Banco de España, el saldo de depósitos de clientes en las sucursales en Cataluña pasó de 184.734 millones a cierre de septiembre, inmediatamente antes de la consulta independentista ilegal, a 153.335 millones a finales de 2017, la cifra más baja desde junio de 2006. Esto supone una pérdida del 17% de los depósitos en tres meses.
Valencia, Andalucía y Aragón, las más beneficiadas
A pesar de que el Gobierno tomó el control de la Generalitat y se convocaron elecciones autonómicas para el 21 de diciembre, el dinero siguió huyendo en la recta final de 2017 hacia otras CCAA, aunque ello no quiere decir que saliera de las entidades, puesto que algunas ofrecieron a los clientes abrir cuentas en las propias sucursales del banco en otras comunidades.
Este traspaso de fondos generó un aumento significativo del saldo de depósitos en otras CCAA, entre las que destacan la Comunidad Valenciana, que sumó 7.217 millones en solo tres meses; Andalucía, 3.527 millones más y Aragón, 2.546 millones. También crecieron los ahorros confiados a la banca en el País Vasco, 2.158 millones; Castilla y León, 999 millones; Galicia, 828 millones; Navarra, 778 millones; Castilla-La Mancha, 736 millones; Islas Canarias, 612 millones; Extremadura, 526 millones; La Rioja, 100 millones y Asturias, 71 millones. Por el contrario, se redujo el saldo de depósitos de clientes en las sucursales de Cantabria, apenas 12 millones; Murcia, unos 78 millones; Baleares, 790 millones y Madrid, 8.024 millones.