Endesa obtuvo un beneficio neto en 2017 de 1.463 millones de euros. Esto supone un aumento de un 4% con respecto al ejercicio anterior. Los ingresos de la energética subieron un 6% hasta alcanzar los 20.057 millones, según ha informado este miércoles la compañía. El resultado bruto (Ebitda) se situó en 3.542 millones, lo que significa un incremento de un 3%.
Su consejero delegado, José Bogas, ha destacado que los seis primeros meses de 2017 fueron especialmente “complicados” por el alza de los precios mayoristas. La producción de la empresa creció un 13%, impulsado por las centrales térmicas, ya que la disponibilidad de energía hidráulica ha sido “escasa”.
Menos inversiones
Endesa realizó inversiones por 1.175 millones, cifra un 3,8% inferior a la de 2016. La deuda financiera ha aumentado en 47 millones, hasta los 4.985 a cierre de 2017. Las cuotas de mercado fueron del 27,3% en la generación peninsular, del 44,1% en distribución y del 35,4% en el mercado liberalizado. En este último, el núero de clientes fue 5,59 millones, con un aumento del 3,1%.
El consejo de administración de la eléctrica propondrá a la junta general de accionistas un dividendo de 1,382 euros por acción con cargo a los resultados de 2017. Esto supone un ascenso de un 4% con respecto a los repartidos en 2016.