El sector de la estiba lleva nueve meses a la espera del reglamento que el Gobierno prometió para concretar las condiciones de los trabajadores tras la liberalización. Las empresas adscritas a la patronal Anesco exigen al Ejecutivo que se apruebe el nuevo texto, que establecerá la capacitación necesaria para acceder al cuerpo de estibadores, las ayudas para prejubilaciones y otras cuestiones sobre la organización del trabajo y el mantenimiento del empleo.

Todo esto, indican, es necesario para poder desarrollar los convenios de cada puerto, ya que el “marco regulatorio completo del sector debe ser establecido con anterioridad”. Además, solicitan al Ejecutivo que les remita lo antes posible el texto para “presentar nuestras propuestas y alegaciones”. Lo han hecho a través de una carta dirigida al secretario de Estado de Infraestructuras, Transporte y Vivienda, Julio Gómez-Pomar Rodríguez.

Incertidumbre jurídica

Con esto, quieren evitar “incertidumbre jurídica, susceptible de generar un incremento de la conflictividad laboral y litigosidad” en el sector a partir del 14 de mayo, un año después de la entrada en vigor del real decreto ley. El Gobierno prometió hace casi un año este reglamento, que supuestamente penderá del real decreto ley y que tenía que incluir lo que el Ejecutivo se negó a introducir en el decreto.

Los sindicatos, encabezados por el Comité Estatal de Trabajadores del Mar (CETM), también han pedido en varias ocasiones que se apruebe el reglamento e incluso han planteado de forma interna medidas para presionar al Gobierno. Barcelona fue el primer puerto en aprobar un nuevo convenio colectivo, a mediados de enero.