La Agencia Europea del Medicamento (EMA, por sus siglas en inglés) tiene que estar operativa en la sede de Ámsterdam, que arrebató la victoria a Barcelona, desde el primer día del Brexit; es decir, antes del 30 de marzo de 2019. Pero como reconoce su director general, Guido Rasi, el edificio donde se ubicará no estará listo para esa fecha. La capital catalana perdió puntos en la votación final por el riesgo político de la independencia de Cataluña.

Los fallos reconocidos ahora con la elección de Ámsterdam hacen ver que se tomó una decisión precipitada tras la inexorable salida de Londres en el marco del Brexit.

Invertirá más recursos

“Tendremos que trasladarnos a locales temporales en la ciudad y luego al edificio final. Esta doble transferencia nos obligará a invertir más recursos”, confiesa el alto ejecutivo de la EMA, que no ha cuantificado el sobrecoste de optar por Ámsterdam en lugar de Barcelona. También reconoce que les llevará más tiempo volver a las operaciones normales, donde nuevamente podrán “llevar a cabo actividades importantes de salud pública” más allá de las impuestas por la legislación.

Desde noviembre pasado, los responsables de la EMA trabajan conjuntamente con las autoridades holandesas para garantizar que la transición sea lo más fluida posible. Durante las últimas semanas mantuvieron discusiones sobre la selección de un edificio temporal. Ambas partes acordaron que los edificios inicialmente propuestos no eran totalmente aptos para el propósito y que, por lo tanto, los socios neerlandeses tenían que encontrar otra opción.

Un parche más que una solución

Al final se ha encontrado una solución que está lejos de ser óptima. Se dispondrá de solo la mitad del espacio comparado con las instalaciones actuales en Londres. Además, se deberán utilizar instalaciones externas para reuniones, aunque los encuentros científicos claves se celebrarán en el edificio temporal.

“Seamos claros, estamos trabajando con plazos extremadamente ajustados. El 1 de enero de 2019 necesitamos un edificio totalmente operativo para mover nuestro personal gradualmente de Londres a Ámsterdam antes del 30 de marzo de 2019, cuando Reino Unido se retire de la UE. Eso significa que incluso si estas instalaciones temporales no son ideales, son la mejor opción bajo las restricciones de tiempo actuales”, subraya Guido Rasi.

Garantizar medicamentos fiables

Reino Unido anunció su intención de retirarse de la UE el 29 de marzo de 2019. Por lo tanto, en noviembre pasado, la UE tomó la decisión de trasladar la EMA de Londres a Ámsterdam. La agencia se estableció hace 23 años y es responsable de la evaluación científica de los medicamentos para uso humano y animal con el fin de recomendarlos para una autorización de comercialización. Su función es clave para garantizar que los medicamentos sean seguros, efectivos y de buena calidad, y que los ciudadanos europeos puedan beneficiarse de productos medicinales innovadores y que potencialmente salvan vidas.

Ámsterdam cumple muchos de los requisitos por los que fue elegida: ofrece buenos enlaces de transporte para los miles de expertos que visitan la EMA cada mes. También proporciona alojamiento y educación para el personal y sus familias en la ciudad y sus alrededores. En una encuesta de personal realizada el año pasado, más del 80% de los 900 empleados dijeron que estarían dispuestos a mudarse con la agencia a los Países Bajos. Era su nueva ubicación preferida.