Vall d'Hebron Barcelona Campus colapsa en el inicio de la gripe. El mayor hospital de Cataluña está hacinando a pacientes en los pasillos cuando la epidemia está aún en sus primeros compases. La situación es tan grave que hoy mismo la junta de personal se ha quejado por escrito a la gerencia del Instituto Catalán de Sanidad (ICS).
Un portavoz de la ciudad sanitaria ha indicado a este medio que la situación en urgencias "no es más grave que otras veces". Según el representante, "se ha notado un pico de pacientes, igual que los hay en otras épocas".
La misma fuente ha subrayado que los pacientes "deben acudir a su dispositivo asistencial más cercano, no al hospital" si su patología es la típica del invierno, como un resfriado o una gripe.
Por lo que se refiere a una posible imprevisión, el alto cargo ha hecho hincapié en que "está todo abierto y todo el personal disponible está trabajando". "El nivel asistencial es máximo y se atiende a todo el mundo", ha recalcado.
Quejas de pacientes y el personal
La versión del centro hospitalario no ha convencido a pacientes y personal. Algunos de ellos han expresado su indignación en las redes sociales, ya sea compartiendo fotografías o comentarios negativos del estado de las urgencias.
Por su parte, los sindicatos han apuntado más arriba: a la gerencia del ICS, que comanda la doctora Candela Calle. "La situación es gravísima. Hoy hemos alcanzado más de 300 admisiones que requerían hospitalización", ha revelado una representante de CCOO.
Situación en el Vall d'Hebron Campus Barcelona esta semana / CG
La activista ha informado que el equipamiento de alta complejidad está tan colapsado que se han hacinado a enfermos en pasillos nunca utilizados, como el de urgencias de especialidades. "En esa zona se han llenado las zonas de paso e incluso las butacas de espera", ha destacado.
La misma fuente ha recordado que la junta de personal se ha quejado por escrito hoy a la dirección del ICS. "Estamos sufriendo de improvisación y pagando los recortes que hizo CiU en salud. Parte de la novena planta no se ha recuperado para hospitalización", ha alertado.
"48 horas en una camilla"
CGT ha utilizado un argumento similar para criticar que los pacientes permanezcan días en urgencias. "Dejen de cerrar plantas y utilizarlas para despachos, laboratorios privados, ensayos clinicos y demás para tener a la gente en camillas durante más de 48 horas sin ningun tipo de intimidad", ha denunciado una portavoz.
Según el sindicato, 75 pacientes esperaban ayer jueves, 28 de noviembre, una cama "fuera de los boxes" en Vall d'Hebron. La gerencia del hospital ha respondido que esas cifras "no corresponden a la realidad", pero no ha aportado números propios "para no entrar en una guerra".
La agrupación ha lamentado que renovar la zona de urgencias del centro sanitario "no sea una prioridad", cuando sí hay inversiones en despachos de alta gama, simulaciones clínicas o iluminación.
Cabe recordar que Vall d'Hebron Campus Barcelona ha reservado este invierno una planta entera del Hospital de l'Esperança --parte del Parc de Salut Mar de Barcelona-- y otra en el Hospital de San Rafael para drenar la hospitalización, sumando ambas unas 40 plazas. Ello, sin embargo, ha resultado insuficiente esta semana.